Por la presidencia. El gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, aspira a arrebatarle la presidencia argentina a Cambiemos.

 

La oposición de San Luis expresó su preocupación por el frágil estado de las cuentas provinciales, que acumulan un rojo de 846 millones de pesos y una deuda flotante de 4.167 millones de pesos, fruto de los esfuerzos del gobernador Alberto Rodríguez Saá por sostener un modelo de gestión que estuvo a punto de naufragar el año pasado por la derrota del oficialismo local en las elecciones primarias nacionales.

Hace pocos días, la Cámara de Diputados puntana -que controla el justicialismo- aprobó el informe de la Cuenta de Inversión de 2017, una "caja de pandora" que confirma el desfasaje financiero de 4.167,9 millones de pesos y un déficit de 846 millones de pesos. Y aporta otro dato: según los cálculos, el gobernador gastó en "servicios personales" 230 mil pesos por día, casi 84 millones de pesos por año.

La información contrasta con el discurso confrontativo del mandatario provincial con el Gobierno nacional de Mauricio Macri, que asegura que San Luis "no tiene déficit" y, además, le recomienda al presidente que "lo consulte" a la hora de tomar decisiones económicas. Del informe del Tribunal de Cuentas, que publicó el sitio El Chorrillero, surge que esos desequilibrios son el resultado del costo electoral que soportó el tesoro de San Luis para asegurar el triunfo del senador Adolfo Rodríguez Saá en 2017, tras revertir la derrota de los hermanos en las elecciones primarias legislativas frente a su exaliado Claudio Poggi, quien recientemente opinó sobre el deterioro de las finanzas.

El gobernador anunció un plan de obras de $5 mil millones.

"El modelo exitoso de los (hermanos) Rodríguez Saá de manejo de las finanzas provinciales está arruinado por el solo deseo de mantenerse en el poder por el poder en sí mismo. La fiesta la estamos pagando entre todos", expresó el senador Poggi.

Pese a este escenario, el gobernador acaba de anunciar un plan denominado "Sueños Puntanos" por obras estimadas en 5 mil millones de pesos.

"En (la provincia de) San Luis no se comunica la ejecución presupuestaria, se viola el mandato que tiene el gobernador de remitir a la Legislatura la ejecución de los gastos, y entonces, para cuando nos enteramos de ellos, ya no es un control que pueda hacer la Legislatura, estamos haciendo la autopsia del presupuesto", se quejó el diputado Alejandro Cacace, presidente del bloque Avanzar y Cambiemos.

Por su parte, el diputado Alberto Fara, también del bloque opositor, denunció que "se gastaron 3.600 millones de pesos en gastos electorales, entre los que se cuentan subsidios a ministros y secretarios de estado por casi 300 millones de pesos, gastos reservados al gobernador por 83 millones, Aportes del Tesoro Provincial para municipios del oficialismo por 164 millones de pesos, es decir, recibieron más dinero los ministros y secretarios que lo que han recibido lo municipios del interior".

Alberto Rodríguez Saá, que es precandidato presidencial del peronismo, propone que el justicialismo se reunifique a partir de una elección interna para definir quiénes enfrentarán a Cambiemos. Y en esa construcción incluyó a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.