Aunque los menos, hubo manifestantes que marcharon con sus rostros cubiertos. Fueron éstos los más reacios a hablar con la prensa y los más agresivos a la hora de hacer sus reclamos. Incluso, cuando caminaban hacia la plaza Hipólito Yrigoyen, tres personas, con pañuelos y capuchas en sus rostros, se abalanzaron sobre un periodista de DIARIO DE CUYO para evitar que este continuara filmando la marcha, que en ese momento estaba saliendo directo por internet.
Efectivos de la Policía tuvieron que intervenir para que la agresión no pasara a mayores. Fueron los mismos manifestantes que en el trayecto pintaron con aerosol varios cestos de basura y hasta largaron bombas de humo.