Un estudio hecho público en Estados Unidos abre una nueva vía en la ya larga experiencia terapéutica y de tratamiento preventivo de enfermedades por parte del más que milenario juego del ajedrez, casos de discapacidad, accidentes cardiovasculares o el TDAH. Según los datos del Instituto Nacional de Salud Mental de Estados Unidos cerca del 5 %, en concreto un 4,7% de personas adultas, ha experimentado un trastorno de pánico en su vida, la mayoría mujeres. Durante el ataque, el paciente experimenta síntomas como dificultad para respirar, fuertes palpitaciones en el corazón (taquicardia) y disfunción abdominal, dolor en el pecho o estómago. Se puede producir por diferentes causas, desde ansiedad social hasta miedo a las alturas, a perder el control u otros factores que provocan estos síntomas.
La novedad figura en un estudio publicado en el Asian Journal of Psychiatry que afirma que jugar ajedrez a través de una aplicación de un teléfono inteligente es efectivo en estos casos.
Entre las conclusiones se encuentra que al iniciarse en los niveles 1 al 3 no se juega demasiado rápido y es a partir del nivel 3 cuando se empieza a vacilar y se produce angustia y ansiedad mental. Otro dato es que el ajedrez sirve como distracción y aleja los ataques de pánico más que otros entretenimientos que no fueron tan efectivos como, por ejemplo, ver la televisión o salir a pasear. La terapia con ajedrez "con el nivel adecuado de dificultad puede recomendarse como un método no farmacéutico muy eficaz para el tratamiento de los ataques de pánico”. Además se ejercita ambos lados del cerebro, previene el Alzheimer, aumentan la creatividad, aumentan la capacidad de resolver problemas, enseñan la planificación y previsión, optimizan la capacidad de memorizar, incrementa la capacidad lectora, facilita la concentración, promueven la autocrítica, estimula el gusto por el arte, disminuye la violencia. En pocas palabras, logran construir en las personas habilidades y competencias socialmente significativas.
En estos tiempos de aislamiento de la población debido a la pandemia del coronavirus; niños y adultos pueden combatir el pánico de manera efectiva con la práctica del ajedrez. El gobierno y las familias tendrían que aprovechar este importantísimo recurso, declarado patrimonio cultural intangible de la humanidad por la Unesco.
Por Ricardo Sánchez Alonso
Licenciado en Ciencias de la Educación
