La producción de unibulbos es tan antigua como el propio cultivo, sin embargo en los últimos tiempos parecen cada vez con más frecuencia en los mercados en la línea de productos gourmet.
En Mendoza, los primeros inmigrantes españoles e italianos los producían bajo condiciones relativamente controladas (dientes chicos, plantados tarde, en almácigos de suelos muy pobres o en cajoneras con arena), para abastecer un mercado de souvenirs exigido por los mayoristas de los grandes mercados concentradores de Buenos Aires. Las solicitudes internacionales de este producto diferenciado exigen un diámetro ecuatorial preferentemente mayor a 30 mm, y para lograrlo se debe conocer una serie de principios que en conjunto alcanzan estos resultados, tales como las necesidades de frío de la variedad, el tamaño de la semilla y la época de plantación. El ingeniero agrónomo Aldo López, del INTA EEA La Consulta, ubicado a 110 kilómetros al sur de Mendoza, junto a los profesionales, José Luis Burba y S. Lanzavecchia, trabajan en un programa denominado "Sistema de producción de unibulbos de ajo", que integra además de la EEA La Consulta INTA, el Cambio Rural y el Ministerio de Agroindustria de la Nación.