El plan en Vialidad Nacional es darle agilidad al tránsito en zonas complicadas de la Avenida de Circunvalación y por eso a los arreglos en la parte del Acceso Sur, en la salida hacia la Ruta 40 en dirección a Mendoza, le van a agregar mejoras en las inmediaciones de la calle Abraham Tapia que incluirán otros accesos y hasta una nueva rotonda. Y como se trata de áreas con una alta circulación de tránsito, durante el desarrollo de los trabajos, que se extenderán por no menos de 18 meses, en el organismo ya prevén que habrá desvíos transitorios por sectores, que se irán eliminando a medida que avancen las obras.
Las obras están calculadas en unos 1.000 millones de pesos, que saldrán del presupuesto nacional, y la idea es licitar y empezar los trabajos en los primeros meses del año próximo
El proyecto total consiste en la refuncionalización de todo el Acceso Sur, desde calle Abraham Tapia hasta la intersección con la Circunvalación, una zona muy importante porque comprende todo el tránsito que viene desde el sur hacia la provincia y que en la actualidad presenta desniveles de servicio en horas pico, generando muchos inconvenientes a los usuarios.
Mientras se desarrollen los trabajos, en el organismo nacional contemplan que será necesario hacer desvíos transitorios por áreas y a medida que se vayan completando, liberar al tránsito y comenzar con otro sector. Así, por ejemplo, habrá desvíos en el sentido sur-norte que comenzarían desde Calle 5 a Abraham Tapia y los vehículos circularán por calles internas de los barrios barrios de la zona. En el sentido norte-sur los desvíos comenzarán desde calle 9 de Julio y las arterias aledañas.
En la repartición aclararon que la empresa que haga los trabajos deberá definir un plan para la circulación de los vehículos, que deberá ser aprobado por Vialidad Nacional.
En la primera etapa el proyecto es construir una intersección tipo trébol con sus respectivas ramas de accesos y egresos tanto desde la Circunvalación a Ruta 40 y viceversa. De esta manera se busca lograr mayor fluidez y facilidad en los movimientos de los vehículos. Y evitar los giros a la izquierda con entrecruzamientos que obligan a detener completamente la marcha, lo que genera embotellamientos y tiempos de espera prolongados, de más de 10 minutos, que suman dificultades a los usuarios aumentando la probabilidad de que se realicen malas maniobras y consecuentes choques o accidentes. Según Jorge Deiana, jefe del Noveno Distrito de Vialidad Nacional, calculan que por la zona circulan unos 30.000 vehículos por día.
En una segunda etapa quieren avanzar con los arreglos del sector este, entre calles Abraham Tapia y la avenida, para lo que plantean modificar los accesos que hay en la actualidad de manera de generar un ordenamiento del tránsito. Como principal cambio proyectan que el lateral este, desde Abraham Tapia hasta calle Las Cañitas, sea de sentido de circulación único en dirección sur-norte, generando un carril separado que permita la circulación en el sentido contrario. También incluirán una rotonda urbana para el ordenamiento del tránsito y una nueva salida hacia la Ruta 40.
Como tercera y última etapa el plan es construir una rotonda urbana en la intersección de Abraham Tapia y lateral oeste de la Ruta 40, para dar mayor fluidez y orden al tránsito que circula por dicha intersección. Para eso buscan volver a las condiciones originales del lateral oeste de la Ruta 40 para que sea de un solo sentido de circulación en sentido norte-sur.
Según explicó Rafael Arjona, encargado del área de Proyectos de Vialidad Nacional, el diseño integral del plan se ha realizado buscando por todos los medios técnicos dar una solución al tránsito vehicular sin perder de vista las variables económicas y sociales y por eso no tienen previsto realizar ninguna expropiación de terrenos.
Por un convenio con la comuna capitalina, el municipio se hará el mantenimiento de la avenida, incluida la limpieza y del pintado de todas las barandas peatonales.
La gran autopista
La Avenida de Circunvalación, que lleva el nombre del exgobernador Federico Cantoni, es una autopista de 16 kilómetros de extensión con dos carriles por sentido de circulación separados por un canal pluvial. Se extiende por los departamentos Capital, Rivadavia y Santa Lucía y fue parquizada durante la gestión del exgobernador José Luis Gioja, lo que le dio un atractivo adicional y la convirtió en un pulmón verde para la ciudad.
Junto con el anillo vial se unen los llamados accesos Norte, Sur y Este, para una rápida distribución del tránsito desde la Capital hacia los departamentos aledaños. De todos modos, ha quedado comprimida dentro del perímetro urbano y por eso, incluso, se pensó en construir un segundo anillo vial en la zona del Gran San Juan. El problema fue que para hacerlo hacía falta expropiar algunos terrenos y por eso después se postergó la iniciativa, aunque en el Gobierno provincial no descartan que en algún momento, y cuando las condiciones económicas lo permitan, se pueda retomar. El gran crecimiento poblacional que han tenido los departamentos del Gran San Juan así lo demandan.