Este domingo, al menos 5 autos de diferentes marcas rompieron llantas y cubiertas por un gran bache que hay a 15 kilómetros del control San Carlos, en la parte mendocina de la Ruta 40 que conecta con San Juan. Se trata de un hueco de grandes dimensiones que no está señalizado y que según los viajeros, pudo haber provocado una tragedia.
En diálogo con este medio, Daniel Vera (28) contó que volvía de Mendoza cuando sintió un fuerte cimbronazo y se detuvo en la banquina para cambiar las ruedas, ya que se habían reventado producto del bache que no pudo ver. Él junto a su pareja y un sobrino viajaban en un Ford Fiesta que, además, sufrió problemas en los amortiguadores.

Mientras estaba reparando las cubiertas, otro auto pasó por el lugar y "se tragó" el mismo pozo, sufriendo daños similares. Pero no terminó ahí, otros tres autos padecieron lo mismo en pocas horas, como una situación en cadena.
A un Fiat Siena se le partió una llanta y se le rompieron dos cubiertas; idéntica suerte corrió un VW Gol Power mientras que un Fiat Palio reventó una cubierta y un Peugeot 405 echó a perder dos cubiertas.

Unidos por "la desgracia con suerte" los conductores fueron, este lunes, hasta Vialidad Nacional para informar lo que había pasado y si bien destacaron que fueron bien atendidos, sólo les dieron un e-mail para hacer el reclamo y de ahí en más, aguardar a una respuesta.
"El temor es que esto se cobre alguna vida porque el pozo es muy profundo y hay gente que va muy rápido en la ruta y puede hacer alguna mala maniobra", expresó preocupado Vera.
Por ahora, no hay señalización ni alguna acción inmediata para reparar el bache.

