El candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, afirmó ayer que Argentina "no tiene ninguna posibilidad de caer en default" o cese de pagos de la deuda si gana las elecciones de octubre próximo.
Además, agregó que "nadie puede plantear seriamente una quita" de capital. Fernández habló ayer por la mañana en el seminario "Democracia y Desarrollo" organizado por el Grupo Clarín en el museo Malba, en la ciudad de Buenos Aires.
Entrevistado por tres periodistas del diario Clarín, Fernández dejó en claro que "nadie se puede plantear la idea de una quita" ya que "es una deuda contraída por un gobierno democrático" y recordó que "nosotros en 2003 todavía estábamos discutiendo la deuda contraída por la dictadura y no tiene nada ver con lo que discutimos acá".
En ese marco, pidió "sacar del escenario la idea de que venimos a incumplir obligaciones asumidas" y planteó que "hay que buscar el modo de cumplir las obligaciones, hay que sentarse a negociar, no me gusta ser hipócrita; el que llegue lo va a tener que hacer porque esa es la realidad".
Tras las primarias, el miedo a un incumplimiento de la deuda argentina se disparó en el mercado financiero, donde muchos temen que un eventual gobierno de Fernández esté menos dispuesto a honrar la deuda. Las preocupaciones se basan en algunas declaraciones sobre el sistema financiero que hizo el opositor en la campaña electoral. Su candidata a vicepresidenta es la exmandataria Cristina Fernández de Kirchner, quien durante su gobierno tuvo un amargo conflicto con los acreedores de Argentina.
Al referirse al dólar, Alberto Fernández dijo que fue "muy crítico del cepo y sigo siéndolo. No fue una buena solución, pero peor solución fue contraer deuda. El cepo es una piedra en una puerta giratoria, donde nadie sale pero nadie entra. Eso nos pasó. Las dos formas (cepo y toma de deuda) no son buenos mecanismos para resolver los problemas, y tenemos que agudizar el pensamiento para solucionarlos".
Consideró que "el gobierno actual derogó una norma que habíamos impuesto con (Roberto) Lavagna de ministro y Néstor (Kirchner) de presidente, que decía que para evitar el juego de los capitales golondrinas y las especulaciones, cada 100 dólares que entraban, 30 quedaban en un banco, 70 en bonos y acciones, y nadie podría irse en un año. (El ministro del macrismo Nicolás) Dujovne lo derogó y ahí vino la peor parte de la salida de divisas. Eso sirvió mucho, puede volver a ayudarnos eso o algo parecido". A su vez, descartó que "la solución sea el control de capitales, ni estoy pensando en un tipo de cambio diferente, pero es cierto que hay que agudizar el ingenio y en eso estamos trabajando".
En el Malba, Alberto reconoció que "es muy difícil bajar la inflación" y dijo que si gana los comicios "partimos de un escenario muy complicado" en ese sentido. "Es muy difícil de bajar (la inflación) pero es parte del desafío. Si yo logro al cuarto año de mandato terminar con una inflación de un dígito sería el tipo más feliz del mundo", indicó.
Al hablar de la grieta, afirmó que "debería avergonzarnos. Pasó de un lado y del otro. Tomaremos la decisión de terminar con eso".
En tanto, llamó a "sepultar un momento de confrontación que se ha extendido por muchos años y caminar hacia una nueva etapa" y pidió "quitarle dramatismo a este momento que implica el fin de un gobierno y el comienzo del otro". "Hay que terminar con esta idea de que las transiciones son difíciles y complejas, son parte de la democracia y hay que tomarlas con calma", manifestó el exjefe de Gabinete. Télam
"Honestidad moral" al armar gabinete
El candidato presidencial kirchnerista Alberto Fernández no quiso dar nombres pero afirmó que sus integrantes del gabinete deberían "tener como denominador común la honestidad moral e intelectual".
No descartó que Martín Redrado -presente en el auditorio- pueda ser parte de su equipo. Por otro lado, sobre las causas judiciales que involucran a dirigentes de kirchnerismo afirmó que quiere "que el Estado de Derecho se respete del mismo modo que ningún corrupto quede libre" y aseveró que eso sucede cuando hay "jueces probos, no que aplican sentencias de acuerdo a la coyuntura".
En la charla también dejó definiciones sobre sus críticas al presidente de Brasil Jair Bolsonaro -"fue un error mío, me deje llevar por su lógica"-, sobre la muerte del fiscal Alberto Nisman -"si alguien lo mató que se haga cargo de esa muerte, estoy seguro de que no fue Cristina"- y sobre los bolsos de José López -"me asqueó verlo"-.