Las tres enfermedades que previene la campaña de vacunación, que comenzó el 1 de octubre y finaliza a fin de este mes, provocaría en personas de distintas edades "consecuencias lamentables, en algunos casos hasta la muerte".

 

Por ello, la jefa de Epidemiología de la provincia, Mónica Jofré, mostró su preocupación por los porcentajes de vacunación hasta el momento. Según sus proyecciones deberían haberse vacunado más del 80% de los niños sanjuaninos en condiciones de hacerlo, y sólo lo han hecho el 58%.

 

“La preocupación radica en que el índice de vacunación proyectado para la cuarta semana debería ser mucho más alto que el que tenemos hasta el momento, pese a todo el despliegue realizado para la campaña. Hay disponibles brigadas de vacunadores que recorren las distintas zonas; el vacunatorio amplió su horario, inclusive atiende los sábados (09.00hs a 12.00hs); están todas las vacunas necesarias, hay empleados del ministerio que recorren iglesias, hipermercados, Parque de Mayo, plazas", señaló Jofré.

 

Para la funcionaria, “hay un desconocimiento con respecto a la enfermedad en sí, y a las consecuencias. Si el niño menor de 5 años adquiere sarampión, puede estar en riesgo de vida. Esta patología lo puede llevar a la muerte porque las complicaciones del sarampión son graves".

 

Y agregó, “es una sola vacuna que lo protege contra el sarampión, las paperas y la rubeola. Estamos hablando con las autoridades de Educación para inmunizar, también, en las escuelas y hacemos rastrillaje en distintas zonas con personal debidamente notificado” explicó.

 

Desde el Ministerio de Salud Pública están realizando todo el esfuerzo posible para incrementar los índices y llegar, al menos, al 80%, mínimo. Hay departamentos sanjuaninos donde los números de adherencia son altos pero otros, los de mayor población como Capital, Rawson, Rivadavia y Santa Lucía, por ejemplo, no llegan al porcentaje esperado y bajan notablemente las cifras totales de la provincia.

 

“Hay que trabajar duro hasta el último día de la campaña” explicó.