La guerra entre Fede Amín y Pijama, banda de la cual formó parte como uno de los fundadores, recrudeció el viernes pasado cuando el músico mostró una imagen en la que el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial extendió el título de la marca "Pijama" a Juan Pablo Álvarez y Nahuel Rodríguez, sus excompañeros; posteo al que sumó luego la maqueta de "Te vo’ a besar", un tema que la banda anunciaba para su estreno. Ayer, en diálogo con DIARIO DE CUYO, Amín y Álvarez dieron sus versiones del conflicto que tomó cuerpo en las redes sociales. El guitarrista señaló que rompió el silencio debido a sus urgencias económicas, ya que no puede pagar las cuotas alimentarias a sus hijas de 9 y 13 años. "Hasta el día de hoy, no puedo salir a tocar. Se me estigmatizó. Con toda la mala propaganda que se me hizo en estos meses se me hace bastante cuesta arriba; me refiero al falso escrache que ya quedó aclarado por Josefina (su novia) y en la Justicia", señaló a meses de que el grupo de cumbia pop que integraba decidiera apartarlo y continuar con el proyecto musical, en medio de la escandalosa denuncia por violencia de género en su contra (fue acusado de maltratar a su novia), lo que generó una disputa interna. Por su parte, en representación del conjunto, Álvarez manifestó que "a pesar de que se le dijo que se iba a comunicar nuestro abogado con su abogada, él prefirió hacer sus ‘escarches’" Y destacó que lo aguantaron "durante años" porque sabían que "sacarlo" les ocasionaría "estas consecuencias", que generaron que tanto Macarena (la vocalista) como Diego Roble (otro de los integrantes del combo) tuvieran que tratarse con psicólogos.
"Desde el 1 de enero intenté por varios medio juntarme con ellos y no pude, incluso a través de abogados, pero nunca respondieron. Nunca me pude juntar a hablar para resolver los problemas". Fede Amín
"Ya nos había pedido segundas oportunidades. Tenemos pruebas de todo y estamos intentando manejarlo en la Justicia así podemos exhibir con pruebas y testigos los motivos de cada situación que nos llevó a no querer tocar más con él", declaró Juan Pablo. "Soportamos que asistiera a trabajar en condiciones que no son las adecuadas, no una sino muchísimas veces", sentenció el también estudiante de abogacía de 31 años, tras la declaración de guerra.
Respecto a la supuesta deuda que reclama, Federico manifestó que "quisieron darme un dinero del streaming con la condición que firmara un acuerdo cediéndoles todos los derechos, pero eso y los derechos de autor se cobran de por vida y me ofrecían una suma ínfima, lo que había entrado en un mes".
"Lo que pretende es que se lo indemnice por dejar la banda, porque según él, es sin justa causa. Pero no aguantamos más la infinidad de causas, entre ellas faltas de conducta, peleas y agravios hacia los integrantes de la banda, hacia los contratantes y hacia la gente de la productora de Buenos Aires con la que estuvimos trabajando que vendía a Marama y Rombai, con la que nos hizo casi caer en juicio y con la que tuvimos que ir con Diego Roble a solucionar el problema en una mediación judicial y pagar un montón de dinero para poder rescindir el contrato porque no querían saber más nada con él", sostuvo el Pijama. "Él pretende una indemnización y algunas exigencias que nos hacen sospechar que está intentando cobrar cosas que ya cobró. Ante el inminente intento de estafa, la banda decide poner todo en la Justicia para probar cada cosa que haga falta y llegar a un arreglo justo para cada parte", recalcó.
"Lo lógico sería que él nos pagara por el perjuicio que nos ha causado (…) La banda estuvo al borde de colapsar y siempre fue reflotada por el esfuerzo de todos, tratando de emparchar los huecos que él iba provocando". Juan Pablo Álvarez
Desde la otra vereda, Amín dijo que lo que le "jode" es que usen su "necesidad" como "una forma de chantaje" para que entregue los derechos que le corresponden. "Es muy fácil intuir que iban a tratar de agarrarse del estigma que ya me pusieron, diciéndome psicópata y no sé qué otra cosa, como pone Macarena, para tratar de desviar la atención del reclamo original", manifestó tras el comentario que la joven hizo en las redes, aunque sin referirse a un destinatario específico.
Acerca de la autoría de "Te vo’ a besar", otro de los puntos en discordia, Amín señaló que "de una forma muy arbitraria, como publiqué en las redes, las canciones están registradas a nombre de Juan Pablo Álvarez". En tanto que Álvarez dijo tener constancia de la autoría de la música, la producción, los arreglos, la grabación, y la letra de muchas de ellas, incluyendo Comerte a besos, el hit que los sacó del anonimato. Y, en referencia puntual a esa canción, afirmó que su versión con letra de Mariana Zunino es "totalmente distinta" a la que expuso Fede, porque dejaron de tocar sus canciones.
Con posiciones encontradas, enojos recargados y lejos de levantar la bandera de la paz, así reflotó la disputa pública que desde el año pasado mantienen Amín y sus excompañeros de Pijama, banda que supo erigirse como la más exitosa de su género en la provincia.