Qué pasó con José Luis Zavala, un anciano de 78 años que vive en Iglesia y que fue visto por última vez el jueves por la mañana, es un gran misterio. Hace 5 días que más de 40 efectivos lo buscan por cielo y por tierra y no hay rastro alguno de su paradero, lo que llevó a los pesquisas a seguir dos nuevas líneas de investigación: la desaparición forzada o que haya viajado a Buenos Aires, pero sin llegar a destino.

¿Cómo empezó el misterio?  El jueves por la mañana la esposa del hombre le dio el desayuno, la medicación y lo dejó en la casa que ocupan en la Estancia Guañizuil, en Tudcum, Iglesia.

Cuando la mujer regresó a las 21 de ese día, su marido ya no estaba. Como Zavala padece demencia senil y antecedentes de perderse, ella y su hijo lo buscaron por las cercanías durante varias horas. Al no encontrarlo, radicaron la denuncia en la Seccional 22 en las primeras horas del día viernes.

La policía inició de inmediato la búsqueda convencida de que estaría en las cercanías, ya que el anciano tiene una dificultad en una pierna que no le permite una buena movilidad. Sin embargo, con el correr de las horas debieron  dar intervención a otras áreas de la Fuerza para ampliar el rastrillaje.

Personal de GERAS, Canes, Montada, Búsqueda y Rescate de Personas y hasta la Policía Federal comenzaron la intensa búsqueda que hasta ahora permitió rastrillar, con drones y helicóptero, 150 km2 en una zona complicado por lo tupido de la vegetación.

“No hay rastro alguno del hombre, ni indicios de que esté fallecido en el campo. Por las dificultades que tiene para moverse no puede haber llegado muy lejos y si, por la cantidad de días que pasaron, hubiera muerto, los animales nos darían indicios de su ubicación”, reconoció el Subcomisario Torres a este medio.

Aunque los rastrillajes continuarán, por estas horas se profundizaron otras dos líneas de investigación: la desaparición forzada o que haya viajado a Buenos Aires.

La pista que lleva a Buenos Aires está vinculada a que el Zavala, jubilado del Servicio Penitenciario Bonaerense, tiene un hijo en aquella provincia y meses atrás había viajado a pasar tiempo con él. Sin embargo, el hombre no está allá, no se llevó su DN ni dinero. Además, no hay registros en las cámaras de seguridad de la terminal, ni constancia de que haya comprado un pasaje. Su afección de salud y las dificultades para moverse, hacen casi imposible para los pesquisas que haya podido llegar solo hasta la Capital para viajar.

Una posibilidad es que alguien lo haya levantado, pero lo cierto es que, por los dichos de su hijo, allá no está. Por estas horas se dará intervención a la policía bonaerense para buscarlo.

Mientras se avanza en esa línea, también se investiga los vínculos familiares en San Juan, pero todavía sin resultados.