
Finalmente, luego de varias horas desaparecida, Keila Gómez regresó anoche sana y salva a su casa, donde la esperaba su madre desesperada. Según informaron allegados a la familia, la menor volvió sola, con una mochila llena de ropa, negándose a decir dónde estuvo.
La chica, de sólo 12 años de edad, se había fugado aprovechandop que su mamá Lorena estaba trabajando. Cuando a la mujer regresó, encontró una carta en la que la joven le avisaba que se había ido.
Al no tener noticias sobre su hija, la mujer se acercó a la Comisaría 25ta e hizo la denuncia.
"Es la primera vez que toma una decisión así. Ella tiene muy buena conducta, pero desde que empezó la Secundaria quiere salir y su papá y yo no la dejamos. Por eso se enoja", dijo la madre a DIARIO DE CUYO.
