La Argentina sigue acrecentando su pasivo con Bolivia por la compra de gas natural. A la deuda ya acumulada de US$255 millones se le sumará un nuevo vencimiento esta semana por otros US$130 millones.
Según explicaron las fuentes al tanto del sector, la demora en el pago se da en un contexto de ajuste en el gasto que implementa el ministerio de Hacienda para cumplir con las metas fiscales acordadas vigentes con el FMI (2,7% del PBI para 2018), y coincide en el tiempo con la salida del ex ministro de Energía, Juan José Aranguren, y de Hugo Balboa, ex presidente de la compañía estatal IEASA, la empresa creada para fusionar los activos de Enarsa y Ebisa.
La Argentina compra 20,9 millones de metros cúbicos de gas por día a Bolivia y paga US$6 por el millar de BTU (unidad térmica británica), cifra que el gobierno bolivianoquiere actualizar ya que este invierno la Argentina también adquirió Gas Natural Licuado (GNL) de Chile y pagó US$10 el millar de BTU.
El escenario ya genera rispideces entre el Gobierno argentino y las autoridades bolivianas. Según el ministro de Hidrocarburos de Bolivia, Luis Alberto Sánchez, en caso de requerir mayores volúmenes de gas, la Argentina deberá pagar más que en la actualidad. "Tendrá que ser un precio indexado a lo que compra de Chile . No podemos rifar nuestro gas. Nuestro gas tiene un precio", afirmó al diario boliviano La Razón.