Entre el 20 y el 22 de marzo se desarrollará en Buenos Aires la Segunda Conferencia de Alto Nivel de las Naciones Unidas sobre la Cooperación Sur-Sur, que contará con la presencia de cerca de 1.500 participantes de los 193 estados miembros de la ONU.

 

La organización de esta reunión busca fortalecer el protagonismo de Argentina en el escenario internacional, luego de la cumbre del G20 del año pasado. "Ratifica su integración al mundo y su relación con todos los países en agendas que generan verdaderas oportunidades para un intercambio beneficioso", aseguran desde el ministerio de Relaciones Exteriores.

 

En la actualidad, la Argentina desarrolla más de 165 proyectos de cooperación con 40 países de América Latina, el Caribe, África y Asia en áreas diversas como agroindustria, biotecnología, salud, derechos humanos, medio ambiente y tecnología productiva.

 

Para el Gobierno de Mauricio Macri, se trata de una oportunidad para acordar un plan de trabajo y poner en marcha consensos acordados en el marco de la Agenda 2030, el Acuerdo de París y durante el G20 sobre alimentación sostenible, capacitación de recursos humanos, cambio tecnológico, sustentabilidad climática, equidad de género, finanzas para el desarrollo y negocios inclusivos.

 

"La sociedad entre países del Sur debe transformarse en mucho más que la mera suma de nuestros recursos y nuestros intercambios. Hoy, más que nunca, tenemos la fundamental tarea de convertir el puente estratégico que nos une en un poderoso efecto multiplicador de nuestras capacidades y de nuestro potencial como naciones libres", aseguró el canciller Jorge Faurie en la carta de invitación a la Conferencia.

 

El Canciller agregó que "en una coyuntura internacional compleja", Argentina aspira a "robustecer el multilateralismo y la cooperación entre los países en pos del crecimiento y el desarrollo".

 

Esta Conferencia multilateral, la más importante sobre Cooperación Sur-Sur, se realiza 40 años después de la adopción del Plan de Acción de Buenos Aires (PABA), a través del cual -y por primera vez- los países en desarrollo definieron el camino a seguir en materia de cooperación técnica. La cooperación técnica, explican desde Cancillería, se basa en el intercambio de experiencias y la transferencia de conocimientos con el objetivo de complementar los esfuerzos nacionales en materia de desarrollo y fortalecer las capacidades de los Estados.

 

La cumbre de Buenos Aires será la única conferencia de las Naciones Unidas en la región latinoamericana durante el 2019 y, como durante el G20, se aprovechará para realizar encuentros bilaterales y regionales con países de Asia, Caribe y África.

 

También, explican desde Cancillería, se llevarán a cabo 150 eventos en paralelo (side events) sobre las temáticas vinculadas con la Conferencia.