Una mujer de 25 años fue arrestada este lunes en la ciudad de Montes Claros, ubicada en el norte del estado de Minas Gerais. El cargo: torturar a su hija de siete años con un cable alargador.

La irrebatible evidencia en su contra fue un video grabado el mismo lunes al mediodía por su ex esposo, que estaba en la casa en ese momento. En las imágenes se puede ver a la mujer golpeando a la niña con el cable y con las manos. La menor, con el rostro ensangrentado, grita y llora aterrorizada.

 

Fuente policiales consultadas por el portal G1 informaron que la mujer atacó ferozmente a su hija tras encontrarla jugando con condones que había sacado de un cajón. El autor del video también fue arrestado y es considerado un instigador de la paliza.

“La niña también fue agredida con golpes en la cabeza y sangraba por la boca y la nariz. Inicialmente, nos dijo que había sido agredida otras veces por su madre, pero después de tener contacto con otros parientes dijo que era la primera vez que se producían esas agresiones”, contó José Fernandes, cabo de la Policía Militar, citado por el medio brasileño.

Las imágenes se hicieron públicas porque el hombre trató de usarlas para extorsionar a su ex pareja, forzándola a volver a estar juntos. Como ella se negó, él terminó mostrándoselas a la Policía para castigarla, creyendo que iba a quedar impune.

La relación entre ellos también tenía antecedentes de violencia. De hecho, se habían separado hace un año y ella había solicitado una orden de restricción para impedirle acercarse a su domicilio.

Los oficiales llegaron a la casa el lunes a la noche, tras recibir el llamado del hombre, que todavía se encontraba allí. Ambos quedaron detenidos en el acto. El cable usado para el ataque fue secuestrado y será analizado en las próximas horas para confirmar que sea el mismo del video.

La mujer fue acusada de tortura y permanece bajo arresto en Itacarambi. Por su parte, el ex esposo fue acusado de extorsión y se encuentra en la cárcel de Bocaiuva.

La estrategia de la defensa de la madre es delegar toda la responsabilidad en el hombre. Aseguró que no sabía que estaba siendo filmada y que al principio solo la estaba retando por haber tomado un condón —de la calle, no de su casa como habría dicho en un primer momento a la Policía—. Pero que los golpes fueron instigados luego por su ex pareja, como si no hubieran sido sus propias manos las que blandían el alargador contra el cuerpo de su hija.

“Él estaba ejerciendo una perturbación psicológica sobre ella y cuando se dio cuenta de que estaba retando a la niña, comenzó a incitar las agresiones. Lo hizo para utilizar las imágenes con la intención de chantajearla para que reanudara la relación”, dijo a G1 Edna Maria Oliveira Gomes, la abogada de la mujer.

La niña fue trasladada a un hospital, donde le trataron las heridas, de las que ya está recuperada. Luego se fue a la casa de una tía, con quien se está quedando por ahora.