El jefe de la Inteligencia argentina, Gustavo Arribas, ya investigado por su supuesta implicación en el caso Odebrecht, pidió ayer a la Justicia que revise los movimientos de sus cuentas bancarias después de una nueva acusación de sobornos de la policía brasileña.
El titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) reaccionó con esta medida a la publicación la semana pasada en el diario O Estado de Sao Paulo de que la Policía Federal brasileña apunta a un
cobro ilegal de 850.000 dólares, que Arribas niega, y que se enmarca en la “Operación Descartes” dentro de la macrocausa de corrupción “Lava Jato”.
El abogado de Arribas, Alejandro Pérez Chada, presentó ayer un escrito ante el juez Claudio Bonadio para que se investigue las cuentas bancarias del jefe de la AFI en Argentina y determinar si le ingresó el dinero de las supuestas coimas. Pérez Chada, uno de los abogados que suelen representar al presidente Mauricio Macri, presentó el escrito ante el juzgado de Bonadio porque allí se encuentra la denuncia por “falso testimonio” contra el cambista ilegal Leonardo Meirelles, quien declaró haberle transferido el dinero.