Desde 1960, Argentina dejó establecido el tercer domingo de agosto como Día del Niño. Sin embargo, este año, el Estado Nacional, a través de la Secretaría de la Niñez, Adolescencia y Familia (Senaf) propuso resignificar el Día del Niño como el Día de las Infancias, con la idea de promover un enfoque plural que busca hacer visible la diversidad multicultural, étnica, de género y lingüístico como múltiples formas de vivir la niñez. Desde este nuevo paradigma, DIARIO DE CUYO consultó a los artistas sanjuaninos dedicados a la producción de contenidos infantiles en varias disciplinas y plantearon diferentes perspectivas de cómo abordan sus propuestas para contribuir al desarrollo personal de niños y niñas, en términos de inclusión y aprendizaje desde las artes.
- María Elena Mariel – Docente
Gestiona diferentes propuestas en articulación con las artes, el espacio del MPBA FR y lo inclusivo. Uno de los ejemplos más palpables es la colonia artística Vacacionarte. "Desde una temprana edad, los niños y niñas que nos visitan sientan un arraigado sentido de pertenencia. Buscamos que los chicos y chicas lleguen a sensibilizarse con pautas de mayor acercamiento e interpretación", comentó la profesora. Por último, aclaró que "desde el museo siempre se ha puesto en valor la expresión de nuestra infancia, hay ciertos cánones que ya no aplican en el arte y menos para la infancia. Sin embargo, en el Museo está permitido ensuciarse, reírse, equivocarse y volver a intentar, de eso se trata un proceso creativo que practicamos".
- Celeste Castro – Actriz, docente
Desde 2010 trabaja en la creación de espectáculos infantiles con obras como La Caperucita, es creadora de las colonias de arte de verano "Colectivo de sorpresas" y hace dos años desarrolla el festivales teatral Sanjuaniiiños. Celeste habla del género teatral como promotor de valores sociales: "La vivencia que tiene un niño con el teatro le queda para toda su vida. Pero para eso hay que saber cómo escribir, conocer bien las dimensiones del lenguaje y tener la atención de ellos el mayor tiempo posible. Es díficil lograr que un niño esté concentrado 50 minutos de obra; por lo tanto trabajamos mucho en la formación de espectador, para que ellos incorporen mediante un concepto lúdico de teatro, contenidos como la ciencia, la filosofía, el cuidado del medio ambiente".
- Fabricio Montilla y Melina Rodríguez – Grupo Tutti Frutti
Como dupla abocada a la canción infantil, Melina y Fabricio consideran positivo hablar de infancias. "Pensamos que la niñez es diversa y el lenguaje juega un rol importante en la construcción de la subjetividad. Se trata de incluir identidades que no están contempladas dentro de la palabra "niño". "Cuando armamos nuestros shows nos dirigimos a niñas y niños. Algunas veces se nos escapó un niñe. Pero lo usamos con cuidado porque no todas las escuelas aceptan el lenguaje inclusivo. Lo importante no está en la letra, sino en la experiencia del juego musical, el lenguaje musical per se, totalmente inclusivo y los integra a todos", contó el musicoterapeuta. Apeló además a un mayor compromiso de artistas, padres y Estado, que los niños y niñas tengan un acceso igualitario a los bienes culturales.
- Gabriela Nebro – Escritora
La escritora aborda varios cuentos infantiles "Mi perro huele a galletas recién horneadas", "El Lobo otra vez", "La princesa y la nanopartícula" y "La huelga de la princesa". Al respecto comentó: "me parece una excelente propuesta hablar de infancias como forma de incluir desde lo simbólico. Me parece que se toma conciencia de muchas problemáticas y en sensibilizarse a ellas". Deconstruir los estereotipos culturales en los géneros literarios, es un eje central en sus textos que cruzan temáticas de ciencia ficción o de las ciencias duras. "Digo, por qué en vez de ser una princesa las heroínas buscan ser astronautas. Entonces, el libro en papel viene a ser el objeto que mejor intervienen los niños y puede resultar el mejor regalo para celebrar el día, pero que le dura toda la vida", manifestó.
- Leo Almazán – Títeres a contramano
El titiritero lleva un largo recorrido en los retablos desde 1998, con La Tribu Andariega; con Mario Robledo; con Verónica Almirón en Luna Lunera y otros colegas. Desde su experiencia señaló: "a la infancia o a las infancias le hace falta el aporte de los artistas para interpretar las realidades que viven. Nuestra lucha como titiriteros siempre fue educar con el arte. Por eso, trabajamos con niñas y niños de igual a igual. Es típico ver en los conocidos chocolates para festejar el Día del Niño, el sorteo de una bicicleta, una pelota o una muñeca. Música para bailar y ya está. Termina siendo un entretenimiento pensado más por los adultos, pero no pensados para los chicos. Creo que es necesario reformular eso y el teatro de títeres apunta a ese sentido".
- Lilia Alonso – Profesora de teatro
Junto a Pablo Rodríguez dirige el elenco El Aljibe y está al frente del taller Entretelones de la comuna de Albardón. Para ella no importa el cambio de nombre: "Pienso que la infancia es una sola, y por más que se cambie el nombre, la realidad que viven seguirá igual. Sí creo que hay que velar más por la educación y la salud de todos, sean niñas, niños o infantes". Y remarcó que sí se puede contribuir a ello a través de la experiencia lúdica y teatral, hecho que se reflejó, por ejemplo en la obra infantil "Portate bien", que habla de valores. "Cuando el niño practica teatro, cree ser alguien que no es, saca a la luz todo lo que le duele, lo que le gusta, lo que le molesta y lo que sufre. Aprendo mucho de y con ellos. El teatro es el mejor juego que puede tener un niño".
- Stella Más – Grupo A Poncho
La docente, integrante del elenco de música infantil (con Fernando Musu y Laura Pasten), expresó su aceptación por considerar a las infancias con una mirada desde lo social y lo cultural: "el lenguaje cristaliza o a veces oculta desigualdades o inequidades y está bueno desnaturalizar. Poner en foco a las infancias no es solo atender a la cuestión de género, también nos obliga a considerar a los chicos con discapacidad". Y expresó que en sus trabajos audiovisuales contemplan este elemento: "Somos músicos y también educadores. Tratamos de poner en valor la noción del juego, como actividad permanente incorporando el lenguaje de señas y ayudar a que los niños sordomudos puedan acceder a lo que están mirando. Y en los shows, nos acercamos con picardía e ingenuidad pero siempre con respeto".