Los 44 marinos desaparecidos del submarino ARA San Juan dejaron 57 niños huérfanos de padre. María Belén Toconás, nacida apenas un mes atrás, es la última hija en sumarse a esa triste nómina, que se agiganta con los padres, madres y hermanos que sobrellevan un mismo duelo.
Así lo reflejaron en Clarín sobre la situación que envuelve a las familias de los submarinistas. Uno de los casos es el de Andrea Mereles (37) es la esposa del sanjuanino Ricardo Gabriel Alfaro, suboficial segundo y cocinero. Tiene dos hijos: Tiziano, de 8 años, que está en 3º grado y Camila, de 17, que cursa quinto año del secundario.
“La primera semana trataba de que Tiziano no viera la tele. Pero un día vio su foto en la pantalla y me dijo: ‘¿Qué hago ahora con mi papá en la tele?’”, recuerda.
Luego, el chico le dijo: "Yo no lloro porque soy valiente". Aquel día Andrea le explicó a Tiziano que su foto salía en TV porque el submarino estaba perdido y la mostraban para encontrarlo.
“Esa respuesta lo conformó, pero más tarde al verme quebrada me dijo: ‘Mamá no llores, porque papá no está muerto’”, recuerda.
En ese enroque en el que los hijos consuelan a los padres, Andrea indagó sobre la concepción de la idea de muerte en Tiziano. “¿Qué sabés de la muerte?", le pregunte. "’No, yo no quiero hablar de eso’, me respondió".
El 25 de abril fue una fecha muy triste para la familia porque se cumplieron seis meses desde la partida del ARA San Juan. "En unos días Tiziano tomará la confirmación y hablando de los preparativos me preguntó si su padre iba a estar. ‘No, no va a estar porque todavía no encontraron el submarino’, le dije. Yo no me puedo sentar a explicarle a él algo que todavía yo misma no sé”, revela.
La madre le hizo un prendedor a Tiziano con la cara del padre que el chico lleva en su mochila escolar.
Camila (17), la mayor, no es hija de Alfaro, pero desde los siete años el marino cumplió ese rol. “Para Camila su papá es él. Ella está muy enojada con el Gobierno y con la Armada y no hablamos de su papá para que yo no me ponga mal”, relata