Guillermo Chauderón (30) se desempeñó como jefe de guardia de la Clínica de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de la localidad bonaerense San Nicolás durante cuatro años. En ese lapso se calcula que atendió a más de 5.000 pacientes y se movió por varios varias dependencias médicas municipales firmando órdenes y recetas. Sin embargo, una denuncia anónima y un simple pedido para certificar su título dejaron al descubierto un increíble engaño: el hombre en realidad era un “falso médico” que adulteró documentación para poder ejercer la medicina.
Ante la notoria irregularidad, hace poco más de un mes el Colegio de Médicos dio aviso a la clínica para que requiriera el título a Chauderón. Cuando le exigieron que presentara el diploma o algún certificado, dijo que lo había perdido en una inundación. Pasaron los días y seguía sin mostrar el título hasta que el organismo solicitó la documentación directamente a la Universidad de La Plata. “No tenemos ningún egresado con ese apellido”, respondieron.
La presión se hizo insostenible y el jueves de la semana pasada el caso se vio marcado por el drama. Chauderón intentó quietarse la vida: se apuñaló cuatro veces en el tórax, una en el cuello y paradójicamente quedó internado en grave estado en el mismo sanatorio en el que trabajó por cuatro años.
“El Colegio de Médicos tiene dos indicios, uno es que se presentó una denuncia anónima que decía que a Chauderón le firmaban su sello con una firma que no era de él. Investigamos esas matrículas y esas matrículas no pertenecían al doctor”, reveló a Cadena 3, Manuel Caro, vicepresidente del Colegio de Médicos.
Concretamente, el hombre falsificó un sello para poder firmar recetas y ordenar tratamientos. Su matrícula nacional corresponde a una doctora y la provincial es de un médico de Luján que se retiró hacia el final de la década de los 90.
“Paralelamente, la UOM mandó una lista de médicos para reconocer una concurrencia y dentro de esa lista estaba esta persona. Al chequear las matrículas nos dimos cuenta que la matrícula nacional era de una doctora y la provincial era de un médico de otro distrito que actualmente trabaja en Neuquén”, explicó. Según Caro, habría presentado un certificado de colegiación apócrifo de un título que no era falso, pero que no le pertenecía
Otro factor que lo llevó al intento de suicidio fue cuando se enteró que recibió una denuncia por la muerte de una paciente. La víctima se presentó en la guardia de la clínica con un cuadro intestinal leve y la habría internado, suministrándole una medicación. La mujer se murió el 15 de noviembre en el hospital, pero como no puede ser denunciado por mala praxis, podría ser acusado de homicidio con dolo eventual.
Pablo Primucci, director del sanatorio, dijo que Chauderón “siempre le dijo que las matrículas eran de él”. Ahora está acusado de usurpación de títulos y honores, ejercicio ilegal de la medicina, falsificación material y el uso de documentos falsos. “Estos delitos tienen una condena de 3 a 15 de prisión”, informó el fiscal Pablo Primucci.
Entró a estudiar medicina años después de terminar el secundario aunque no finalizó la carrera. Fueron sus fuertes vínculos políticos los que le permitieron acomodarse en el área de salud. En 2012 fue elegido presidente de la Unión Cívica Radical (UCR) de San Nicolás y al poco tiempo ingresó a la Municipalidad para trabajar en el servicio de emergencias médicas.
Su cercanía con el entonces intendente Ismael Passaglia -actual titular del Instituto de la Vivienda y aliado de la gobernadora María Eugenia Vidal– le valió un traslado a la delegación de La Emilia, donde comenzó a ejercer la medicina. Hoy, pelea por su vida y enfrenta una grave acusación.