La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) autorizó en Argentina el uso del enfortumab vedotin, un nuevo tratamiento para cáncer de vejiga localmente avanzado o metastásico, para el que las alternativas terapéuticas son reducidas.
"El enfortumab vedotin es una medicación con una estructura y un mecanismo de acción novedoso. Es un anticuerpo monoclonal dirigido a una proteína presente en la superficie de la célula tumoral que tiene unido a su estructura una pequeña molécula de quimioterapia. Al ingresar al cuerpo, el anticuerpo se une a la célula del tumor y libera en su interior la quimioterapia, con el objetivo de eliminarla", explicó Federico Losco, oncólogo de la Unidad de Uro-Oncología del Instituto Alexander Fleming, en el barrio de Colegiales, en Ciudad de Buenos Aires.
El especialista detalló que este conjunto de medicaciones tienen el nombre de anticuerpos conjugados (anticuerpos unidos a otra estructura, en este caso quimioterapia).
"En el último tiempo se demostró su utilidad en un gran número de tumores. Enfortumab vedotin demostró una gran efectividad en el tratamiento de pacientes con tumores de vejiga en etapas avanzadas de la enfermedad, particularmente en aquellos que fueron tratados previamente con otras drogas como quimioterapia e inmunoterapia", indicó.
Losco señaló que "en los últimos años hubo grandes avances en el tratamiento de los pacientes con cáncer de vejiga, particularmente en aquellos con enfermedad avanzada (con metástasis secundarias)".
"Hasta hace muy poco tiempo sólo contábamos con la posibilidad de tratar a los pacientes con la quimioterapia tradicional, que sigue siendo una herramienta muy importante para el tratamiento de la enfermedad. Pero en los pacientes en donde esto no funcionaba o que la enfermedad empeoraba luego de un periodo de tratamiento no teníamos nada", dijo.
Y sostuvo que actualmente hay diferentes alternativas como la inmunoterapia y tratamientos dirigidos a mutaciones específicas. "El enfortumab vedotin es una nueva opción que ha demostrado prolongar la supervivencia y aumentar la respuesta de la enfermedad en estudios realizados en una gran cantidad de pacientes alrededor del mundo, incluyendo estudios donde participaron pacientes de Argentina", describió.
Una de las principales causas del cáncer de vejiga es el tabaquismo, responsable de cerca del 50% de los casos.
Por otra parte, algunas investigaciones sostienen una conexión entre la infección del virus del papiloma humano (HPV) y el desarrollo de cáncer en la vejiga. Según las estimaciones, es posible que hasta un 17% de los casos de tumores vesicales se deban a HPV.
Existen otros factores de riesgo menos habituales, como la exposición a algunas sustancias químicas por haber trabajado con pinturas o solventes en imprentas o en peluquerías; también, la ingesta prolongada de agua que contiene arsénico; o contraer esquistosomiasis, una enfermedad producida por parásitos frecuente en poblaciones rurales de América latina y África.
Casi 4 mil
Cada año se diagnostican 3.700 personas con cáncer de vejiga en Argentina, el noveno de incidencia para ambos sexos aunque es mucho más prevalente en varones, según especialistas. Esta enfermedad se puede detectar de manera precoz con análisis de orina.