El Gobierno nacional confirmó que resolvió apurar la compra de un avión presidencial, por unos 25 millones de dólares. Así trascendió luego del susto por la descompensación del presidente, Alberto Fernández, durante una gira por Indonesia donde asistió a la Cumbre del G-20 en Bali.
Según trascendió, el reciente viaje del Presidente a Indonesia fue el detonante para apuntalar la tramitación de una licitación que había quedado pendiente por una licitación que había abierto el gobierno ante la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).
La operación que contempla la adquisición de un Boeing 757-256, modelo 2000 sería en torno a unos 25 millones de dólares, cuyo desembolso sería en cuotas. La Presidencia busca que la compañía, propietaria de la aeronave, C&L Aviation Group, que resultó seleccionada por la entidad que regula la aviación civil a nivel mundial, acepte esa modalidad de pago.
"Eso es fundamental porque (el ministro de Hacienda) Sergio Massa dijo que no va a largar todos los dólares juntos", trascendió que advirtieron desde el entorno de Fernández.
El gobierno daría como parte de pago el Tango 01, que fue adquirido en 1992, durante la presidencia de Carlos Menem, por unos 66 millones de dólares y que resultó un pésimo negocio para las arcas del Estado: está fuera de funcionamiento desde 2016, por un mantenimiento anual en torno a los 220 mil dólares, y sería tomado como parte de pago por alrededor de tres millones de dólares.