A manera de política de Estado, el Gobierno nacional continuará este año con las becas del programa Progresar, que apunta a otorgar una ayuda económica y diversos estímulos para jóvenes que desean completar sus estudios básicos o cursar carreras universitarias. Con el objeto de que este programa social funcione realmente como una beca de incentivos para estudiantes, que necesitan de una ayuda económica, los responsables de su instrumentación han previsto un aumento de los montos, pero al mismo tiempo un incremento de las exigencias a fin de que la ayuda llegue a los jóvenes que realmente demuestren su predisposición para avanzar en los estudios, terminándolos dentro de los plazos previstos. Dos aspectos que debían ser mejorados para que el programa alcance un fin práctico y provechoso para las necesidades actuales del país.

El presidente Macri, al anunciar las nuevas características que tendrán las becas destinadas a alumnos de primaria, secundaria, terciaria, de la universidad y de institutos de formación docente, consignó que el objetivo es lograr que cada vez haya más jóvenes que estudien, pero que también se reciban para poder encontrar su camino, que es el objetivo final de todo este esfuerzo.

Para lograr esas metas el Gobierno ha apuntado a reconocer el “mérito” como una condición indispensable para otorgar el beneficio y las distintas mejoras que se han previsto en cada una de las etapas o niveles educativos.

Con el fin de promover determinadas disciplinas se ha previsto una serie de incentivos o premios según la carrera elegida y el rendimiento académico que el alumno demuestre.

Hay que recordar que el Progresar está orientado a jóvenes de entre 18 y 30 años cuyos ingresos familiares no superen el monto de tres salarios vitales y móviles, y que quieran terminar de cursar sus estudios en cualquiera de los niveles mencionados. Actualmente tiene unos 600.000 beneficiarios.

El nuevo esquema pone de relieve ciertos valores y algunas exigencias. En el caso del secundario el beneficiario de la beca tiene que pasar de año y ya no alcanza con asistir a la escuela o seguir como alumno regular aunque sea repitiendo. Tanto en primaria como nivel medio la beca comprende 10 cuotas de $1.250, es decir un total de $12.500 contra los $10.800 que se estaban otorgando.

La vuelta de tuerca que el Gobierno nacional le ha dado ahora al programa Progresar apunta a que los incentivos determinen un mejor nivel educativo y el consiguiente desaliento de la deserción escolar.