Un tiroteo en el interior de un bar ubicado en el centro de Rosario dejó un saldo de un muerto y dos heridos. La reconstrucción preliminar que hizo el fiscal que investiga el hecho al llegar al lugar es que pasadas las 5 de la mañana se desató una violenta discusión en el boliche "Child", un establecimiento que funciona como after, lo que desencadenó en una feroz balacera.
Los testigos indicaron que se escucharon al menos diez detonaciones. El inmueble tenía dictada una clausura y su habilitación estaba vencida.
Tres personas, una de ellas una adolescente de 17 años, fueron derivadas de urgencia a distintos hospitales de la ciudad. Horas más tarde, el director del Hospital de Emergencia Clemente Alvarez (Heca) confirmó el deceso de uno de los heridos.
Fue identificado como Vladimir Medina, de 20 años y con antecedentes por robo, de acuerdo a lo señalado por fuentes del Ministerio Público de la Acusación (MPA). El otro hombre baleado se encuentra grave y la chica se recupera de un disparo en una de sus piernas.
Medina estaba imputado por una balacera contra un club en la que fueron heridos cinco chicos en 2015.
"Hubo una discusión dentro del boliche que provocó las detonaciones", señaló el fiscal Rafael Coria tras las primeras pesquisas. La policía logró detener a una persona.
En el bar no hay cámaras de vigilancia, aunque el fiscal aseguró que hay testigos que pueden aportar datos claves para la causa.
En medio del despliegue policial, los vecinos comentaron a los periodistas que son habituales las peleas, los gritos e incidentes en el local bailable, que funciona todas las madrugadas de martes a domingos, pese a una clausura dictada en junio, una caducidad de su habilitación desde julio 2016 y una denuncia penal contra su titular.
"El lugar tiene un comportamiento que está fuera de todo norma", admitió el Secretario de Control y Convivencia Ciudadana Gustavo Zignago.
Fuente: Clarín