Héroe. El capitán de Banfield, Darío Cvitanich, marcó el gol del triunfo para su equipo a través de un penal muy bien ejecutado.

 

El resultado sabe a poco pero Banfield ganó bien su partido ante Gimnasia en el estadio Florencio Sola, para atesorar su primer triunfo en la Superliga. Lo definió en el arranque, con un penal soberbio de su capitán, Darío Cvitanich.

Supo a lo que jugó. Con un Julio César Falcioni que se recupera de una grave enfermedad en el banco, su equipo respondió con un esquema bien falcionista: bien parado atrás, contraatacando y usando bien los espacios.

La falta de Oreja sobre Bertolo a los 10 minutos le permitió abrir el partido con un penal que Cvitanich ejecutó a la perfección. Merecidamente, el local se puso en ventaja y pudo haberla aumentado.

Su contracara fue Gimnasia. Impreciso en los pases, el equipo de Troglio se equivocó mucho.

Pero Banfield no lo aprovechó del todo, pese a que tuvo jugadas para liquidarlo.

El colombiano Arboleda defendió también el 1-0.

Aunque el Lobo no fue muy profundo, cuando atacó encontró las respuestas acrobáticas del arquero, que transmitió confianza en cada pelota como ya es su costumbre en los últimos tiempos.

De esta manera, Banfield sumó sus primeros tres puntos en el torneo local y ya piensa en la copa Sudamericana, certamen en el que se enfrentará por la ida los octavos de final ante Defensa y Justicia el próximo martes 21 en la cancha del club de Varela.

Un cruce que puede ser fundamental en lo que vendrá para este semestre para ambos clubes argentinos.

Por su parte, el conjunto de Troglio cortó con una racha de tres triunfos al hilo esta temporada eliminó a Sportivo Belgrano de San Francisco y Olimpo en Copa Argentina y se estrenó con un triunfo en La Plata ante Argentinos Juniors el sábado pasado-.

La fecha que viene recibirá en su estadio a Talleres de Córdoba con la intención de volver a sumar de a tres. Por la Superliga, el Taladro visitará en Liniers a Vélez.

 

Volvió Julio al banco

Transitando la recuperación de una grave enfermedad, Julio Falcioni regresó ayer al banco de suplentes de su equipo, Banfield. Lo hizo con la pasión de siempre y recibiendo el afecto de los hinchas del Taladro. Además, se acercó hasta el banco para saludarlo su colega de Gimnasia, Pedro Troglio. Una de las secuelas que le dejó a Falcioni la enfermedad es sus problemas para hablar y es por eso que se encargó de las indicaciones más fuertes su ayudante de campo desde esta temporada, Sebastián Battaglia. El jueves, Falcioni había reaparecido en los entrenamientos del club y ayer volvió al ruedo como tanto le gusta.

En tanto, Battaglia analizó que "se hizo un partido muy bueno en líneas generales. Por ahí, el defecto mayor estuvo en la falta de eficacia para concretar las chances que generamos. Igual, nos vamos muy conformes con lo realizado por los jugadores".