El sector que reúne a los bares y restaurantes pidió ayer al gobierno que se les permita abrir el domingo en la noche, en virtud de que se celebra el Día del Padre, y que al día siguiente es feriado nacional, para aprovechar las ventas. Por el mismo motivo se insistió además en extender una hora el cierre de los locales el viernes y sábado previos, y aunque el pedido aún no ingresó para su análisis al Comité Covid, caerá en saco roto. Fuentes del gobierno anticiparon que no se evalúa realizar ningún tipo de flexibilización a pesar de los festejos.
""El gobierno no evalúa ninguna posibilidad de modificar el decreto vigente", se aseguró en forma categórica al consultarse sobre la petición, y se reiteró que todas las actividades económicas cierran a las 20 horas, salvo el domingo que es a las 18. En el gobierno señalaron que la situación sanitaria no da para más flexibilizaciones, que se están haciendo todos los esfuerzos para mantener todo abierto, casi todos los días; y que por el contrario, "quizá se debería estar cerrando más cosas" para frenar la circulación del virus. Durante la mañana se conoció la intención del sector gastronómico, ante la proximidad del fin de semana largo. El domingo 20 es el festejo para conmemorar a los padres, y al día siguiente será feriado debido a que se trasladó el del 17 de junio, fecha en la que se conmemora el Día del Paso a la Inmortalidad del prócer Martín Miguel de Güemes.
""Hemos solicitado a las ministras de Turismo y de Gobierno, respectivamente, extender al menos una hora el horario de cierre el viernes y sábado dado que será un fin de semana largo, y el domingo poder abrir de noche", dijo Ruben Miadosqui, vicepresidente de la Asociación Hotelero Gastronómica, y vocero del rubro de bares, restaurantes y cafés. Agregó que el pedido es para dar mayor posibilidad de venta y también contemplando que, al ampliar el horario, la concurrencia queda más espaciada y se evitan amontonamientos.
""Siempre tratamos de manejar el diálogo de la mejor manera, pero pedimos que se flexibilice un poco la situación para que se pueda trabajar mejor", dijo Miadosqui. La petición proviene de uno de los sectores más perjudicados económicamente por la pandemia y sus restricciones, el cual actualmente tiene restringida la atención en los locales a un aforo del 30 % y un horario de cierre de lunes a sábado a las 23 para el ingreso de público, y a las 24 para desalojar totalmente el local. Los domingos sólo pueden abrir hasta las 17 para que una hora después esté todo cerrado, según estableció el gobierno desde el 9 al 25 de junio, luego de adherir al DNU nacional. Las restricciones de circulación se mantienen de lunes a sábado de 0 a 6, y los domingos desde las 18. "No va a haber ninguna modificación porque estamos atravesando el peor momento", dijo la fuente.
Trabajadores
3.600 son los empleados que se estiman trabajan en restaurantes, cafés y bares. El gobierno provincial otorgó un subsidio de $15 mil por cada trabajador registrado, así como también a empleados de comercio, y de actividades no esenciales y $22 mil a los de turismo.