Brasil tomó el protagonismo desde el arranque del partido, aunque le costó encontrar claridad en los últimos metros para generar peligro en la etapa inicial. La mayoría de sus aproximaciones terminaron en el embudo guaraní y Junior Fernández no tuvo grandes intervenciones.
Es más, Alisson, arquero de la Verdeamarela, fue el encargado de realizar la mejor atajada y la hizo después de un remate de Derlis González cuando el encuentro se acercaba a la media hora.
El desarrollo no se modificó en el complemento. Brasil iba, Firminho cayó en el área y Roberto Tobar cobró penal. Pero el árbitro fue a chequearlo en el VAR, consideró que el contacto fue afuera y expulsó a Fabián Balbuena. El tiro libre de Dani Alves se fue al lado del palo.
El local fue con todo en busca de la victora. Arthur probó a Junior Fernández desde afuera del área, se lo perdió Gabriel Jesús y después también definió mal Everton. Paraguay ya aguantaba como podía.
Fernández se lució después de un cabezazo y cuando el reloj ya marcaba los 45 la base del palo derecho le dijo que no al zurdazo de Willian.
Las últimas estuvieron en los pies de Everton y Coutinho. No quiso entrar y se fueron a los penales en Porto Alegre. Allison se lo atajó a Gustavo Gómez y después convirtieron Willian, Miguel Almirón, Marquinhos, Bruno Valdez, Coutinho y Rodrigo Rojas.
Firminho la tiró afuera y emparejó las acciones, pero Derlis González (ya había errado con Argentina) tampoco le acertó al arco y Gabriel Jesús, a quien muchas veces se le niega el gol en el seleccionado de su país, fue el encargado de cerrar la serie de penales y meter al local en las semifinales.