A pesar de que la Justicia procesó a Eduardo Cáceres, por lesiones leves agravadas por el vínculo, por la denuncia que su expareja Gimena Martinazzo hizo en su contra por violencia de género, las acusaciones entre ambos, parecen no tener fin. En el mismo día, ambos dirigentes del PRO hicieron respectivas presentaciones judiciales en las que, básicamente, indicaron que el otro mintió en la causa original. En el caso del diputado nacional, acusó a la dirigente de Rawson por falsa denuncia, al indicar que se contradijo en su declaración judicial de cómo sucedieron los hechos de violencia, entre otros puntos. En el caso de Martinazzo, le pidió a la Justicia que la denuncia que hizo la abogada Paola Miers, contra Cáceres, en la que lo acusó de soborno y de adulterar chats para favorecerse en la causa por violencia, sea incorporada en el expediente principal y que el legislador sea investigado por adulteración de documento privado y presunta estafa procesal.
Ambas presentaciones se hicieron el jueves y en Tribunales llamó la atención el escrito de Cáceres, ya que se trata de una defensa que pertenece a la causa en la que está procesado. Cabe aclarar que dicho procesamiento no está firme, ya que el legislador apeló esa decisión. Su definición está en manos de la Cámara Penal. Juristas consultados indicaron que la acusación por falsa denuncia, tiene poco camino por recorrer, porque un juez ya tuvo en cuenta diversos elementos incriminatorios que confirmaron los dichos de Martinazzo, como el informe médico, que corroboró las lesiones, y las pericias a su celular, que ratificaron que el legislador lo tuvo en su poder y lo manipuló, lo que derivó en la agresión luego de una discusión. Por otro lado, la denuncia fue presentada en la Unidad Fiscal de Delitos Especiales, perteneciente al sistema acusatorio, quien deberá evaluar el escrito. En esa línea, la Fiscalía puede archivar la presentación, declararse incompetente, ya que la causa principal se tramita en otro sistema penal, o reservar la denuncia hasta que el juicio por violencia concluya.
Sobre su escrito, Martinazzo indicó que "con la denuncia de Paola Miers, en la que adjuntó copia certificada ante escribano de los chats que mantuvo con Cáceres, queda comprobado que fueron manipulados para presentarlos como prueba en la causa por violencia de género". Así, sostuvo que el legislador incurrió en los delitos de adulteración de documento privado y presunta estafa procesal, ya que el legislador "apeló el procesamiento en su contra indicando que el juez no valoró esos chats que él mismo modificó".
Además de las causas penales, hay expedientes de ambos a definir por el Tribunal de Disciplina del PRO.
- Causas políticas
Tras la denuncia contra Cáceres, Martinazzo hizo una presentación en el Tribunal de Disciplina del PRO para que el legislador sea sancionado. Dicho expediente está a la espera de la definición judicial. Por otro lado, Martinazzo fue denunciada por una concejal de Rawson quien sostuvo que fue obligada a pagarle el equivalente al 20 por ciento de su sueldo todos los meses. Martinazzo cuestionó que el tribunal haya cerrado la etapa de prueba y defina la denuncia en los próximos días.