Muchas mujeres tienen dudas de cuál es el momento ideal para lavar sus corpiños. Algunas lo hacen tras cada uso, mientras que otras deciden utilizarlos varias veces antes de llevar a cabo esta tarea. Lo cierto es que la frecuencia de lavado está determinada por varios factores.

Como sea, no es conveniente esperar a que la suciedad sea evidente. Si bien no siempre se nota a simple vista, la ropa acumula células muertas, microorganismos y residuos de sudor que facilitan el desarrollo de infecciones y molestias cutáneas.

Los sostenes son una de las prendas íntimas más utilizadas por las mujeres; aportan estética y sensualidad al busto, además de contribuir con el bienestar. Un artículo divulgado en Hunimed University sugiere que su uso puede mejorar la postura y ayudar en la prevención de problemas en la columna.

Aun así, utilizarlos puede suponer problemas cuando no se les brinda los cuidados adecuados. En este sentido, hay que prestar especial atención a la frecuencia de lavado, pues es una prenda que tiene contacto directo con una zona de la piel donde hay tendencia a la acumulación de sudor y bacterias.

El dermatólogo Alok Vij explica en una publicación de la Clínica Cleveland que mantener el sostén "saludable" implica equilibrar el cuidado de su tela con la eliminación de los residuos de sudor y aceite de la piel. 

Así las cosas, si la prenda no se lava de forma regular, causa molestias que van más allá de manchas o mal olor. Para ser más precisos, puede derivar en irritaciones en la piel, erupciones cutáneas e incluso infecciones bacterianas y fúngicas.

Sumado a esto, el calor corporal impacta en la tela y tiende a alterar su forma. De ahí que se recomiende dejar descansar entre usos y hacer un lavado habitual para que se conserven en buen estado y cumplan su función.

Entonces, ¿cada cuánto hay que lavar los sostenes? La respuesta corta para este interrogante es: depende.

Hay varios factores que determinan la necesidad de lavar la prenda tras cada uso o luego de varias puestas. En general, si son de colores claros o estuvieron expuestos al sudor, será necesario lavarlos al instante.

En cambio, si se utilizan apenas unas horas al día y no hubo sudoración profusa, es posible repetir su empleo sin inconvenientes. De acuerdo con lo expresado por el Dr. Vij, de la Clínica Cleveland, el lavado puede realizarse luego de dos o tres usos. Un poco más, si la prenda se usó solo en un momento puntual.

Una buena idea es rotar los sostenes para evitar que sus copas y sus tirantes se dilaten o pierdan elasticidad por el calor corporal. Es decir que, en lugar de colocarse el mismo por dos o tres días seguidos antes de lavarlo, alternamos con otro.

¿Aplican las mismas reglas para los sostenes deportivos? Por supuesto que la respuesta es no. Durante la práctica de actividades deportivas se suele expulsar más sudor; además, el ambiente cálido crea un ambiente propicio para el crecimiento de bacterias y hongos. Dicho esto, lo mejor es limitar su uso a una sola puesta.

¿Es bueno lavar los sostenes luego de cada empleo?

Algunas prefieren lavar sus sostenes luego de cada uso, sin excepción alguna. El inconveniente es que esto acelera el deterioro de las telas y los elásticos, por lo que disminuye su vida útil. Así pues, siempre que se pueda utilizar dos o tres veces, es mejor.

Consejos para lavar correctamente tus corpiños

Un detalle que hay que tener en cuenta a la hora de lavar los sostenes es que se trata de prendas delicadas. Sin importar si son de lencería o deportivos, lo más recomendable es lavarlos a mano. Aun así, con algunos cuidados es posible introducirlos en la lavadora.

Lavado a mano

– Incorpora una pequeña cantidad de detergente en un balde y cúbrelo con agua fría.

– Sumerge el sostén y agítalo suavemente con las manos.

– Déjalo en remojo unos 15 o 20 minutos.

– Enjuaga bien para remover todo el detergente.

– Exprime con cuidado el exceso de agua, pero sin escurrir o retorcer, ya que se puede deformar la prenda.

– Al ponerlo a secar, cuelga el sostén por el borde central, en lugar de por las tiras. Recuerda que el peso del sostén mojado puede arruinar su elástico.

Fuente: Mejor con salud