Señor director:
Afuera frío. Adentro calor humano. Suena el dos por cuatro. Dulce tango milonga. Timbales, arpa y xilofón. Contrabajos, flauta dulce y redoblante. Trompetas, Cornos y Violines. Taquito militar, Discépolo, Gardel y Lépera, Mores y Piazzolla. Dulce tango milonga suena y uno sueña que todo es mejor. No hay lugar en la sala ni físico, ni espiritual. El frío invernal se olvida Y el alma en paz. El maestro los esfuerza ¡Ritmo! ¡Ritmo! Dos por cuatro milonga tanguera sentimental. Nueva vida tiene el tango. Una dulce vida. Ya no de queja, sino de esperanza. Y veo a Discépolo sonriente. No ya sentado junto al calefón.
