Un violento arranque del 2021 vivió esta madrugada Carolina Píparo junto a su familia cuando tres parejas de motochorros los acorralaron e intentaron asaltarlos en la ciudad de La Plata. Según las primeras versiones, los delincuentes escaparon sin lograr su objetivo. “No es el principio de año que nadie espera”, tuiteó la legisladora este mediodía, tras aclarar que tanto ella como quienes la acompañaban se encuentran bien y agradecer a sus seguidores por el apoyo.
Todo empezó en las primeras horas de este viernes, cuando la ahora funcionaria, su esposo y sus hijos circulaban con su auto por el centro platense. Las tres motos con los seis delincuentes a bordo los rodearon de repente en lo que, se presume, fue un intento de robo, indicó el portal local 0221.
En plena investigación aún, no trascendieron los motivos por los cuales los sujetos escaparon del lugar antes de poder concretar el asalto. En cambio, se supo que en su huída fueron perseguidos por el esposo de la legisladora provincial y actual Secretaria de Asistencia a la Víctima y Políticas de Género de la Comuna, Ignacio Buzzali, quien trató de alcanzarlos sin éxito.
Mientras intentan reconstruir cómo fue el ataque e identificar a los agresores, una fuente cercana a la causa dijo al mismo medio que en la persecución, el marido de Píparo atropelló a un motociclista que no tenía ninguna vinculación con el hecho que es investigado por personal de la Comisaría Primera de La Plata.
Una salidera bancaria, el caso que marcó la vida de Píparo
Píparo fue baleada el 29 de julio de 2010 cuando con su madre, María Ema Cometta, retiró dinero de la sucursal del Banco Santander Río de 7 y 42, en La Plata, y se dirigió a su casa, en las calles 21 y 36 de la capital provincial.
Apenas habían caminado unos metros cuando dos hombres en moto la atacaron y la golpearon para intentar robarle el dinero y uno efectuó un disparo que impactó en el mentón de Píparo y le perforó un pulmón.
La mujer fue trasladada en ese momento al Hospital de Gonnet donde fue sometida a una cesárea de urgencia de la que nació su hijo Isidro, aunque murió una semana después.
En el 2013, el Tribunal que juzgó el caso impuso prisión perpetua a Moreno, a quien Carolina identificó como el tirador; a Luciano López, conductor de la moto que la siguió; a Carlos Jordán Juárez y a “Pimienta” Silva, encargados de “marcarla” adentro y afuera del banco; y a Juan Manuel Calvimonte, por reclutar a todos los integrantes.
Sin embargo, el Tribunal de Casación provincial le bajó después la pena a Silva a 23 años de prisión, tras lo cual, el condenado solicitó en 2018 que le otorguen el arresto domiciliario por problemas de salud.
