La llave del polémico caso "Eros For Men" vuelve a quedar en manos de la Corte de Justicia. El 7 de julio pasado, los ministros Marcelo Lima, Adriana García Nieto y Daniel Olivares Yapur habían rechazado un planteo de la Defensa para revisar la causa por la que la esteticista Patricia Coria (60) fue condenada a 4 años de cárcel. Esa pena la impuso un tribunal al considerar probado que entre el 23 de febrero y el 6 de mayo de 2022 promovió, facilitó y explotó económicamente la prostitución de una de sus empleadas en su casa de masajes que funcionaba en 25 de Mayo, al Este de Mendoza, en Capital. Ahora, el nuevo defensor de la mujer, Nicolás Fiorentino, volverá a plantear en el máximo tribunal local un recurso para evitar que su clienta vaya a la cárcel, algo que se espera de quedar firme el fallo: la ley establece que quienes reciban castigos mayores a 3 años deben cumplirlos efectivamente en el Penal de Chimbas.
Si la Corte no da luz verde para que Coria aterrice con sus reclamos en la Corte Suprema de Justicia de la Nación, la mujer podrá pasar a cumplir su castigo en la cárcel de Chimbas, indicaron fuentes judiciales.
En cambio, si es habilitada para agotar su último recurso en el país, el efecto de la sentencia se postergará hasta conocer esa decisión, indicaron fuentes judiciales.
Otro rechazo en la Corte no implicará que el fallo quede firme, pues a la Defensa le quedará cuestionar llegar a la Nación a través de un "recurso de queja".
Fiorentino considera que su clienta no debe ir a prisión porque el fallo aún no está firme ya que, cuando fue juzgada, no se cumplieron normas del procedimiento de cómo se debe actuar en causas penales; se valoró arbitrariamente la prueba; y se violaron algunos de sus derechos amparados por la Constitución Nacional.
Uno de los argumentos del defensor fue que no existió prostitución. Y que en todo caso, cualquier persona tiene el derecho a autodeterminarse sobre su libertad sexual, pues nadie había obligado a la ahora exempleada de Coria a tener ese tipo de contacto, a pesar de negar la existencia de esa situación en el local comercial.
La propia Coria dijo que la joven la denunció para zafar, pues unos días antes le había robado dinero a un cliente. Y que era la primera vez que le pasaba algo así en sus 40 años de trayectoria, en los que tuvo como clientes a políticos, altos funcionarios judiciales, empresarios o gente del ambiente de la televisión.