"A Sportivo lo hace grande su gente". "De Sportivo se nace, no se hace". "En las malas mucho más". Son algunos de los refranes que suenan cada domingo en los cánticos en la popular de Desamparados. Y según Rubén Moreno, lo que expresan esas canciones son ley en Sportivo. Ley que los hinchas deben cumplir al pie de la letra y que es precisamente lo que hace diferente al hincha puyutano de los demás: la fidelidad.
Nacido en el año 1934, "Don Moreno" es historia viva en Sportivo Desamparados. El creador de la primera barra del Víbora, en el aniversario numero 100 del club de sus amores, rememoró viejas épocas, cuando era él quien manejaba la popular. En una casa pintada de verde y blanco en pleno corazón de la Villa Zavalla, "cuna y base de Sportivo Desamparados" como reza la bandera que cuelga del alambrado en el Serpentario, a Rubén los 100 años de "su" club, como él lo define, lo encontraron en un excelente estado de salud. Solamente se pierde los partidos que se juegan de noche, pues el único problema que lo aqueja es la vista, por eso si el día se presenta óptimo, tiene su lugar asegurado en el tercer escalón de la platea donde se ubica junto a un almohadón verde y blanco junto a su hermana Perla, quien a sus 83 años viaja desde Santa Lucía para sentarse junto a su hermano y ver a Desamparados.
Dice que nació con la camiseta puesta. Que comenzó a jugar en Sportivo en el año 1946 con 11 años. Por esos tiempos no había ni Escuelita ni Inferiores. El paso inicial era jugar en la Sexta, Rubén luego continuó jugando en la Quinta, Cuarta, Tercera y Reserva. "No jugué en la Primera. Me di cuenta que me gustaba más ser hincha y alentar". Por ese entonces, el "Caudillo", como lo habían bautizado sus vecinos de la Villa, era el líder de la barriada capitalina. "Iba un paso al frente" dice él. Y como Sportivo crecía a la vez que crecía San Juan con la construcción de villas y barrios, la popular ya contaba con 12 barras: "La del Barrio Fermín Rodríguez era poderosa, tenían como mil hinchas, el Barrio Huazihul y Punta de Rieles también eran fuertes, entonces yo como líder de la Zavalla insistí que fuéramos todos juntos y lo logré, y así se creó el ‘Movimiento de Villas Unidas’", expresó.
"Pintábamos los árboles, los postes, poníamos gallardetes, juntábamos una orquesta con músicos y una murga, era una verdadera fiesta ver a Desamparados. Toda la provincia nos seguía", rememoró.
Ahí nomás, recuerda el exitoso año 1969 cuando el "Desamparados de San Juan", como se hizo conocer al país, lograba la hazaña en el Estadio Abierto del Parque de Mayo venciendo a Chaco For Ever y se abría paso al Nacional. Su memoria está con las imágenes intactas y así lo señala: "No cabía ni un alfiler, eran colas y colas de gente queriendo entrar. Había gente arriba de las cabinas, en la pista de atletismo, en los pista de ciclismo, en los pinos", expresó.
Él, como líder que era, recuerda que estaba dentro de la cancha lanzando las bombas que un vecino de la villa había fabricado, dice que eran 200 para el ingreso del equipo, 200 en el final y recuerda que largaron entre 500 y 600 más en la caravana que recorrió los principales departamentos de la provincia. "En la punta de la caravana iban los Galván, una gente de acá del barrio con unos parlantes anunciando que Sportivo iba al Nacional. Cuando ellos iban por Cinzano, recién del Estadio salíamos nosotros en la cola de la caravana, íbamos en una camioneta largando las bombas con un mortero. La gente salía a aplaudirnos porque Desamparados caía bien en la gente, íbamos a representar a la provincia en el torneo más importante del país", expresó.
Su tono de voz manifestando el orgullo que siente por Sportivo ni siquiera cesa cuando recuerda el peor momento que fue descender a la B Local. Y ahí nomás expresa cuál es la ley del hincha de Sportivo. "A pesar de estar jugando dos temporadas en la B, la gente nunca dejó de ir. Es más, los hinchas fueron con mucho más fervor y para hacer mucho ruido porque eso es lo que siempre, toda la vida, diferenció al hincha puyutano: ser fiel y alentar en las malas", expresó. "Recuerdo en otros tiempos cuando el equipo salía vencido, íbamos con toda la barra y con la orquesta y nos metíamos en el vestuario a cantar, de esa forma los motivábamos. Veníamos por la Libertador cantando y la gente pensaba que habíamos ganado pero no, el resultado poco importaba", expresó.
A sus 85 años vivió de todo: alegrías y derrotas. Lo vio por pasar por los Regionales y Nacionales, por la B Local y por la B Nacional. "¿Qué sueño? Volver a verlo en el Nacional B. Ojalá se le pueda dar, por su historia y por su gente", señaló.
Creación y pura humildad
El 10 de septiembre de 1919, estudiantes de la Quinta Agronómica (hoy Escuela de Enología) crearon el Club Sportivo Desamparados. Por estar reunidos en la Plaza Desamparados y por la Virgen que estaba allí, "la protectora de los Desamparados y los pobres". A su sede actual frente al Impres llegaron después de transitar por varios lugares, desde el ’38 al ’44 ocuparon un terreno cedido por el Gobierno. Por el terremoto decidieron irse para que se creara el Barrio de Emergencia Ameghino.
Unidos por la sangre
En su historia, Sportivo se dio el gusto de tener a casi una cuarta parte de su formación titular con la misma sangre en las venas. Sucedió en tres ocasiones. Se trata de los tres hermanos José, Pablo y Nehún Nehín, de los tres Roldán: Pablo, Orlando y Julio, y de los tres Vega: Ismael, Vicente y Ángel, que compitieron por separado, aunque algunos de los miembros de los dos últimos clanes alcanzaron a jugar al mismo tiempo.
Y un día se iluminó
El 1 de abril de 2007 Sportivo inauguró su sistema de iluminación artificial ante Racing de Córdoba a estadio colmado. Se invirtieron 200 mil pesos que fueron solventados por el aporte de un grupo de socios tras la obtención del título Apertura 2006. Los hinchas realizaron las 4 excavaciones donde fueron colocadas las torres que pesaron casi dos toneladas y una altura de 21 metros. Cada torre cuenta con 18 kilovatios de potencia y es un desafío para este 2019 aumentar la capacidad lumínica.
"Desamparados de San Juan"
Así se hizo conocer al país por su participación en los Torneos Nacionales de AFA. Fue el primer equipo sanjuanino en llegar allí, en 1969. Después también jugó los Nacionales del 1971, 1972, 1973 y 1974. Lo hizo en los Regionales del 1976, 1987, 1988, 1990, 1991, 1993 y 1994 y en los Torneos Argentinos en el año 1995 y por invitación de la AFA a dicho Torneo 1997. Con la reformulación de los torneos, accedió al Argentino A en el 2004, ascendió a la B Nacional en el 2011 y al actual Federal A lo hizo en 2016.
En San Juan, gritó
El primer campeonato del fútbol sanjuanino lo ganó en el año 1928, después se coronó en las ediciones de 1963, 1966, 1968, 1970, 1971, 1972, 1973, 1975, 1976, 1983 y 1991. En el 2018 se quedó con el Torneo de Invierno venciendo a Alianza en la final; y en la superfinal con Atenas, quien fue ganador del Torneo de Verano, Sportivo vio la derrota, por eso el certamen del 2018 no se cuenta como título Oficial aunque de igual manera significó un gran logro para todo Puyuta.