Policías de Drogas Ilegales pusieron tras las rejas a dos hombres y una mujer, luego de allanar sus casas en la Villa Marini, Santa Lucía, al descubrir que allí tenían distintas cantidades de cocaína fraccionada y que se dedicaban a la venta de ese estupefaciente. Había sido el juez federal Leopoldo Rago Gallo quien ordenó allanar los domicilios de los sospechosos y secuestrar las evidencias necesarias (drogas, teléfonos, dinero, elementos para fraccionar) que demostraran lo que los investigadores ya sospechaban: la existencia de drogas con fines de comercialización, indicaron fuentes policiales.