¿Alejamiento? Hugo Moyano (izquierda) y Luis Barrionuevo (derecha) pueden quedar alejados de la cúpula cegetista.

 

 

Por estos días, la Confederación General del Trabajo (CGT) se prepara para ir perfilando una nueva conducción, cuyo próximo formato nadie parece tener en claro. Pero al menos se sabe cómo no será: no más triunviratos, ni lugar tampoco para Hugo Moyano y Luis Barrionuevo, dos dirigentes con reconocidas pretensiones de liderazgo.

La conformación del nuevo núcleo sindical proyectado por las organizaciones tradicionales contempla también la exclusión de raíz de los llamados “movimientos sociales” (piqueteros), las CTA (Central de Trabajadores de la Argentina) y los aliados del kirchnerismo y de la izquierda, con quienes Hugo Moyano busca articular un polo político-sindical opositor al gobierno de Mauricio Macri.

La fractura producida con el moyanismo marcó el agotamiento de la conducción cegetista integrada en un triunvirato conformado por Juan Carlos Schmid, Héctor Daer y Carlos Acuña. Sí hubo una inmediata puesta en escena de una mayoría de gremios con protagonismo en el proceso de unidad que finalizará en unos meses con la elección de un único secretario general de la CGT.

La mayoritaria línea dialoguista integrada por los Gordos (Sanidad, Comercio, Federación de Luz y Fuerza), los Independientes (UOCRA, UPCN, Obras Sanitarias) y los sindicatos del transporte agrupados en la CATT, viene sosteniendo conversaciones con otros sectores hasta ahora autoexcluidos de la conducción, como el MASA de Sergio Sasia (Unión Ferroviaria) y el exmoyanista Omar Viviani (Peones de Taxis). Esperan la integración de la UOM (metalúrgicos) de Antonio Caló y los mecánicos de SMATA, de Ricardo Pignanelli.

El jueves hay un encuentro de la CGT por la nueva conducción.

No es menor la influencia de las 62 Organizaciones en estas conversaciones: gozan del respaldo político de la Casa Rosada después de que éstas apoyaron la candidatura de Mauricio Macri en 2015.

El líder de esa agrupación fue el fallecido Gerónimo Venegas (de los Peones Rurales de la UATRE), a quien sucedió Ramón Ayala, quien continuó con la misma línea de adhesión a Macri. En las 62, descartan que el nuevo jefe de la CGT deba salir de su organización. Priorizan el diálogo.

La elección del nuevo titular de la CGT llevará el tiempo que vaya desde convocar el consejo directivo sindical a un Comité Central Confederal y luego un Congreso que determine al sucesor del triunvirato.

Ya suenan posibles candidatos: los ferroviarios Sasia y Omar Maturano (La Fraternidad) están en la grilla, mientras los Gordos y los Independientes tendrían resueltas las postulaciones del actual triunviro Héctor Daer (Sanidad) y Andrés Rodríguez (UPCN, estatales), como secretarios General y Adjunto, respectivamente.

El día 4 habrá un encuentro de todos los sectores. Al día siguiente el convite será en la propia CGT y convocado por el consejo directivo. Mientras, Mauricio Macri consiguió mucho de lo que se proponía: cerró los aumentos de paritarias con tope en el 15%, sin cláusula gatillo, pero con revisión si la inflación supera lo acordado. Ya firmaron con esos parámetros los empleados de Comercio y Obras Sanitarias, entre otros.

Fuente: Télam