Todos, en mayor o menor medida, alguna vez soñamos con “la vestimenta del mañana”, esas prendas que empezábamos a imaginar a partir de series, libros y películas, como Star Wars, Blade Runner y, en especial, Volver al futuro.

 

Lo bueno es que Nike acaba de dar un nuevo y definitivo paso en esa dirección con el lanzamiento en nuestro país de las Nike HyperAdapt 1.0, unas zapatillas “que se atan solas”. O dicho de manera más técnica, que se adaptan electrónicamente al contorno de cada pie.

 

 

Las Nike HyperAdapt 1.0 “se atan solas”. De manera más técnica, se adaptan electrónicamente al contorno de cada pie.

 

“La innovación en Nike no es soñar con el mañana, sino avanzar hacia él”, declaró el diseñador estrella de la marca, Tinker Hatfield y agregó: “De hecho, a veces entregamos una realidad antes de que muchos ni siquiera se la hayan imaginado”.

 

La firma sostiene que lo que hoy es manual, mañana se volverá innato. Con ese pensamiento en mente se embarcó en la creación de un calzado que se comunique con el atleta, buscando restablecer la relación entre la tecnología y el pie: de reactivo a simbiótico.

 

Su tecnología E.A.R.L (Electro Adaptive Reactive Lacing, en inglés) reacciona ante un atleta que se pone el calzado, ya que cuando el talón toma contacto con los sensores, los cordones se ajustan automáticamente.

 

En un futuro, agregan, se busca que el producto no solo se adapte, sino que se anticipe a las necesidades del atleta, ya que significaría la reinvención del rendimiento personalizado. La misión de Nike es servir al atleta. Por eso, HyperAdapt 1.0 es un primer gran paso hacia ello.

 

Su tecnología E.A.R.L (Electro Adaptive Reactive Lacing, en inglés) reacciona ante un atleta que se pone el calzado, ya que cuando el talón toma contacto con los sensores, los cordones se ajustan automáticamente. Al costado cuenta con dos botones de “+ o – “ para poder ir ajustando o aflojando el calce a la medida del contorno del pie. Esto genera que el calzado identifique las necesidades del cuerpo en tiempo real, lo que beneficia la performance del atleta de manera única.