El seleccionado de fútbol de Chile, que atraviesa el mejor momento de su historia tras haber obtenido en forma consecutiva las dos últimas Copa América, en 2015 y 2016, ambas veces con entrenadores argentinos, enfrentará hoy a Alemania (15 horas), el actual campeón del mundo, que en esta ocasión apostó a jugadores jóvenes, en la final de la Copa Confederaciones que se desarrolla en Rusia.
Previamente, a partir de las 9, se enfrentarán por el tercer puesto los seleccionados de México y Portugal, este último sin el crack del Real Madrid Cristiano Ronaldo (fue papá de mellizos y se lo liberó del compromiso) en el estadio del Spartak de Moscú, en la capital rusa.
Chile alcanzó la gloria con dos definiciones por penales, ambas veces ante la Argentina, en la Copa América que organizó en 2015 y la del año pasado en los Estados Unidos, la primera vez dirigido por Jorge Sampaoli y la segunda por Juan Antonio Pizzi, los dos DT santafecinos, uno más ligado a Newell’s el otro a Rosario Central.
La ‘Roja‘, con una ‘Generación Dorada‘ integrada por futbolistas de calidad que brillan en clubes de Europa, como Gary Medel (Inter, de Italia), Arturo Vidal (Bayern Munich, de Alemania) o Alexis Sánchez (Arsenal, de Inglaterra), logró sus mejores resultados merced a las actuaciones de otra gran figura, el arquero Claudio Bravo (Manchester City, de Inglaterra) y desea ir por más gloria en el certamen que es la antesala del Mundial del año próximo, que organizarán los rusos, aunque la ‘roja‘ aún no está clasificada.
En Chile, la presencia argentina, además de Pizzi, la aportará el tucumano Pablo Hernández, surgido de Atlético de Tucumán y actual jugador del Celta de Vigo.
La confianza de Pizzi
El técnico chileno Juan Antonio Pizzi aseguró ayer que Chile ha demostrado en los últimos años que puede competir con ‘cualquier selección‘. ‘Siempre hemos podido competir al máximo nivel. Hemos demostrado que podemos disputarle los partidos a cualquier selección en cualquier instancia‘, dijo el DT.
Adelantó que en la final su equipo saldrá a ‘someter al rival y a exigirle que juegue bajo presión‘, y se mostró convencido de que sus jugadores ‘crearán ocasiones de gol. Ganar mañana (por hoy) sería un broche (de oro) a un mes muy intenso en el que Chile ha disputado ocho partidos entre amistosos y oficiales’.
