Como fiel reflejo de la intención de su DT, Colón asumió el protagonismo en el Cementerio de los Elefantes. Y a pesar del gol de Mauro Da Luz a los 15 minutos de juego, el Sabalero no se inmutó y lo dio vuelta rápidamente con goles de Christian Bernardi, a los 17’, y Wilson Morelo, a los 25’. Nicolás Leguizamón, a los 40′ del complemento, puso el 3-1 definitivo.

No brilló, es una realidad, pero el conjunto santafesino se mostró convencido con lo que pide Pablo Lavallén, por la iniciativa que mostraron en el primer tiempo. Pero como el entrenador advirtió en la previa, esa vocación ofensiva los hacía correr riesgos. Y así fue que, de contra, Da Luz oscureció la noche santafesina por unos minutos.

Pero con la misma vocación con que habían salido a buscar el 1-0, los dirigidos por Lavallén fueron en busca de la clasificación y encontraron la ventaja que merecían desde antes. Tras el 2-1, los roles se invirtieron, aunque el local no resignó sus chances en ataque y Guillermo Ortíz tuvo el tercero.

En la segunda mitad, con los recaudos lógicos por tener un pie en octavos, Colón nuevamente intentó ampliar la diferencia. Y a pesar de una mala salida de Leonardo Burián, que pudo haber sido el empate, no sufrió demasiado en manos de los dirigidos por Jorge Giordano.

El golpe del knock out lo dio Leguizamón en el final y de esa manera aseguró una clasificación merecida, ya que el equipo santafesino fue superior en los 180′. Y la trifulca que se dio en el tiempo adicionado, fue el reflejo de la impotencia de un conjunto uruguayo que nunca pudo imponerse desde lo futbolístico a Colón.

En la próxima instancia, el Sabalero enfrentará al ganador entre Argentinos y Deportes Tolima, que definirán la serie en Colombia el jueves.