El flan de huevo es un postre milenario: varios siglos antes de Cristo, los fenicios, griegos y romanos lo llamaban Tyropatina. Su principal característica está en sus ingredientes: huevos (muchos) leche y azúcar. La versión moderna es este flan sin horno.

La receta original se cocina durante una hora o más, a baño María, en el horno, Como lleva mucho tiempo, se popularizó la aversión industrial, que ofrece un polvo que sólo se hierve con leche.

Para esta época de cuarentena, en que tenemos que arreglarnos con lo que hay en la alacena, esta receta es ideal. Cuando no hay cajitas de flan para preparar, con muy poco lo replicamos, y sin tanto esfuerzo, con este flan sin horno.

Ingredientes:

  • Leche entera, 500 ml
  • Huevos, 5
  • Azúcar, 5 cucharadas soperas para el flan, y 5 cucharadas soperas más para el caramelo

Procedimiento:

1. Mezclar ligeramente los huevos con el azúcar, sin batir.

2. Agregar la leche.

3. Preparar el caramelo en una sartén, cuidando de no pasar el punto para que no salga con gusto a quemado.

4. Volcar el caramelo caliente en los moldes, cubriendo bien el fondo y los laterales. Puede ser un molde grande o varios individuales.

5. Colocar la mezcla en los moldes caramelizados, cuidando de no ocupar toda la superficie: dejar un centímerttro libre en el borde.

6. Tapar los moldes con papel aluminio (o su tapa si la tienen)

7. Cocinar a baño María sobre la hornalla unos 40 minutos.

8. Dejar enfriar antes de llevar a la heladera. Desmoldar cuando están bien fríos.

Truco

No batir la mezcla, solo revolver hasta unir los ingredientes. Si queremos hacer más cantidad, la proporción es un huevo y una cucharada de azúcar por cada 100 ml de leche entera. Al cubrir los moldes con el papel aluminio, cuidar que no toque el agua del baño María. Llenar la olla hasta la mitad del molde, y colocarlo cuando el agua ya está hirviendo.