Nico es el menor de 4 hermanos y el regalón de la casa. Pero, ni el afecto de su familia fue suficiente para evitar que se fuera entristeciendo cada vez más y perdiendo el interés hasta de ver su programa favorito de televisión. Pero ahora comenzó a recuperar la alegría y el entusiasmo. Es que reabrió el lugar donde compartió alegrías y experiencias que mejoraron su calidad de vida. Es uno de los chicos con discapacidad que asiste a Sueños Dorados, un taller de contención e integración que se dicta en el CIC de Médano de Oro, en Rawson. Cerró en el 2018 por cuestiones administrativas y reabrió sus puertas este año a pedido de las familias de los chicos.

Nico no fue el único que sufrió por el cierre del taller. Dos de sus excompañeros también padecieron algunas crisis nerviosas como consecuencia del encierro por la pandemia y por falta de las actividades recreativas y creativas que desarrollaban en Sueños Dorados. "Muchos papás nos preguntaban sobre la reapertura del taller y los problemas que tenían sus hijos desde que dejaron de asistir. Además, no hay cerca un Hogar de Día u otro lugar donde se contenga a los chicos con discapacidad con actividades que mejoren su calidad de vida. En base a estas necesidades, decidimos reabrir el taller que cerró por cuestiones administrativas tras un cambio de gestión", dijo Ángeles Speranza, coordinadora del CIC.

El primer día de funcionamiento del taller asistieron 8 chicos a las clases. Ahora son 12, de entre 13 y 35 años, y con discapacidad física y mental. Por esta demanda, es que se está analizando la posibilidad de que este espacio funcione tres días a la semana y no dos como sucede hasta ahora. "Para muchos de estos chicos, participar de estas actividades es su única salida y la forma de romper con su rutina", dijo.

El taller Sueños Dorados funciona los martes y jueves, de 16 a 18. Los chicos participan en distintas actividades como dibujo, pintura y clases de cocina. Este año se agregó el festejo de los cumpleaños.

 

El equipo

El taller Sueños Dorados cuenta con la participación de Margarita Fontivero, Itatí Narváez, Abel Murcia y Valeria Ferrer que se encargan de diagramar y llevar a la práctica las actividades. Algunas de ellas, como juegos integradores, se realizan al aire libre.