Liquida. Edwin Cardona, la figura de Boca en la Bombonera, remata de zurda y sentencia el 2-0 para su equipo ante un Arsenal que se hunde en el promedio del descenso.

 

Boca tuvo anoche otra decepcionante actuación y siendo puntero del campeonato junto a San Lorenzo pero con un partido menos, terminó escondiendo las pelotas de recambio como símbolo de la preocupación que le provocó Arsenal, último en las posiciones de la Superliga, aunque por lo menos le quedó el consuelo de ganar apretadamente por 2 a 0 y así volver al triunfo después de dos caídas consecutivas.

Ya en la primera parte hubo dos Boca. Uno hasta los 20 minutos sin ideas, cuando Arsenal lo esperaba y no le daba espacio. Pero fue entonces cuando apareció en escena el aliento del hincha de Boca y los locales, con más ímpetu que ideas, acorralaron a un Arsenal que era ordenado pero iba dejando huecos. Dos apariciones del uruguayo Nahitan Nández y un tiro libre de Cardona fueron los argumentos del ultimo campeón mientras la Bombonera temblaba. Hasta que volvió a aparecer la calidad de Cardona, en cuentagotas, pero calidad al fin, y con un pase cruzado habilitó a Vadalá, el “9” menos esperado, para poner el 1 a 0.

Boca no perdía dos partidos seguidos desde el 2015. Ayer cortó esa racha negativa.

En el segundo tiempo no cambió demasiado el panorama respecto del primero, ya que los dirigidos por Humberto Grondona tuvieron pasajes de superioridad, pero no fueron profundos, ya que llegaron una sola vez con un remate de Leonardo Rolón a los 28 minutos de la parte final, muy poco para inquietar al ultimo campeón del fútbol argentino. A los ganadores les alcanzó entonces con las pinceladas de Edwin Cardona, que en el descuento iba a cerrar el marcador con un golazo de zurda desde el borde del área, el despliegue de Nández y el colombiano Wilmar Barrios. Con eso, con poquito en definitiva, Boca venció en forma justa a Arsenal y sigue siendo puntero con 27 puntos junto a San Lorenzo, pero con un partido menos.

Pero este fue un Boca distinto a los anteriores, a ese especialmente que sumaba ocho victorias en la misma cantidad de fechas, a partir de las ausencias mencionadas, a las que se puede sumar también el suspendido Paolo Goltz, además de tener que poner al juvenil de 20 años Guido Vadalá, el cuarto “9” en la consideración de Guillermo detrás del goleador Benedetto, Walter Bou y Junior Benitez con molestias. Boca no tuvo a sus figuras e intentó sin embargo mantener su esencia, pero le costó reeditar lo que quiere su entrenador.

 

Trabado. Resultó el cruce en la Bombonera entre uno de los punteros de la Superliga, Boca, y el último equipo de las posiciones y en zona de descenso como Arsenal.

 

 

 Claves

 

Controlado

Arsenal hizo un buen planteo táctico y eso le permitió aguantarlo media hora a un Boca que navegaba en la intrascendencia en su faceta ofensiva. Le maniató los generadores de juego y tapó los dos laterales cuando pasaban al ataque.

 

Pegó y cambió

Con la apertura del marcador para el xeneize mediante el delantero juvenil Guido Vadalá, se abrió el partido para un Boca que encontró algo de la tranquilidad que había perdido con el paso de los minutos y sin abrir el marcador.

 

Deslucido

Arsenal por más que en algunos momentos intentó salir a jugar más adelante, demostró que no tiene material. Por algo el equipo de Sarandí es firme candidato a ser uno de los que pierda la categoría al finalizar esta Superliga.