Con un doblete del ex San Martín Carabajal, Patronato ganó y mandó a todos a la B

Golpeó dos veces en la primera etapa. Y luego, sufrió hasta lograr el desahogo. Con dos goles de Gabriel Carabal, Patronato venció 2-1 a Argentinos Juniors en Paraná y se aseguró la permanencia en Primera.

El "Patrón" consiguió su objetivo mediante una gran levantada en 2019, basándose en el orden impuesto por Mario Sciaqua, en las trepadas de Gabriel Compagnucci, el manejo de Gabriel Carabajal y la dupla de ataque: Gabriel Ávalos y Germán Berterame. En el duelo decisivo fue contundente: anotó dos veces en el primer tiempo y luego aguantó. Fue perjudicado: no le sancionaron un claro penal por mano de Quintan. En el primer tramo del partido, dominaron los nervios. Argentinos propuso un juego de lucha y pelotas largas, similar al que pregona Patronato con sus atacantes difíciles de contener, y el desarrollo se hizo desprolijo, con muchos roces y pocos pases enhebrados en continuado. Rompió la estructura del encuentro Gabriel Carabajal, con una de las especialidades de lacasa: el remate de media distancia.

El mediocampista ofensivo ex Talleres, volcado sobre la izquierda, dominó el balón y sacó un remate combado que quedó depositado en el ángulo superior derecho de Lanzillota: 1-0.

Y a los 31 minutos, en un contragolpe letal, los locales, en un Bartolomé Grella completo, volvieron a celebrar. Germán Berterame encabezó una corrida de 50 metros y cedió otra vez para Carabajal, que firmó el 2-0.

Argentinos recién consiguió elaborar una jugada sobre el final de la primera parte. Antes, había inquietado con una chilena de Batallini, a los 24 minutos. Pero a los 44, se asociaron Alexis Mac Allister, Batallini y Hauche, quien con un tiro desde la puerta del área superó a Bértoli y descontó: 2-1.

En la segunda parte, el "Bicho" dominó el pleito. El "Patrón" cedió terreno y pelota pra sostener el resultado y apostar a una réplica. Argentinos inquietó desde la claridad de Alexis Mac Allister, la llave de la generación. A los 23′, dibujó una enorme asistencia para Spinelli, quien remató tres dedos y el balón se fue cerca del palo. A los 31′ envió un centro que impactó Sandoval, pero se topó con la estirada del arquero Bértoli.

Pero el "Patrón" aguantó. Y tuvo su recompensa. Los de Paraná eran los únicos que dependían de sí mismos para permanecer un año más en la Superliga argentina. Hizo su parte y condenó a San Martín, Tigre y Belgrano. San Martín de Tucumán ya había perdido la categoría.