Con la vestimenta de uno de los campus que participó

 

La historia olímpica para San Juan expresa que hasta hoy un sólo sanjuanino se había colgado en su cuello una medalla, el voleibolista Raúl Quiroga, que en Seúl 1988 logró una presea de bronce. Este 17 de octubre de 2018 otro sanjuanino consigue tamaño logro: Juan Hierrezuelo, en el básquet 3×3, en los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018. 

 

Pero ¿quién es este pichón de crack?

 

Nació el 7 de noviembre del 2000. Su club de origen fue Ausonia, donde dio sus primeros pasos con la naranja. Con sus 17 años y fichado por San Lorenzo de Almagro, es una de las figuras que el básquet argentino tiene en su cantera. El gigante sanjuanino mide 2.03 -sus brazos se extienden a un total de 2.12- y juega de alero. Como tantos otros pibes que abrazan este deporte, tiene como ídolo a Emanuel Ginobili, el mejor de todos los tiempos.

 

A pesar de su corta edad, ya ha participado de campus de la NBA donde ha pulido su talento. Está radicado en Buenos Aires donde aún está en el colegio.

 

Pinta de crack

 

 

 

Su definición como jugador: "M destaco por mi físico, con brazos muy largos -2.12m de apertura-. Me falta crecer en cuanto a la musculatura, donde vengo trabajando con un excelente plan que tiene buenos frutos. La idea es jugar por fuera, buscando el mejor tiro, asistencia o el aro con bandeja.

 

Su equipo favorito:  San Antonio Spurs

Jugador favorito: Kyrie Irving

 

Una canción: The scientist, de Coldplay

 

Un libro: El señor de los talentos, de Julián Mozo

 

Una película: Harry Potter

 

Una comida: Milanesas con papas fritas

 

Una ciudad: Barcelona

 

Un país: España

 

Un sueño: Ser jugador profesional

 

Una frase que te haya marcado: "Lo único imposible es aquello que no intentas"