En medio de una nueva escalada del dólar, mañana habrá un súper vencimiento de $ 645.000 millones en Lebac, equivalente nada menos que al 65% de todo el dinero en circulación.

 

 

Fuentes cercanas al Banco Central aseguraban que será un vencimiento acotado con unos $ 300.000 millones en poder de los bancos y organismos públicos y sólo 5% en manos de inversores extranjeros, unos $ 32.250 millones.

 

El "supermartes" es muy importante porque el Banco Central intenta controlar el precio del dólar y la inflación con las Lebac, ofreciendo altas tasas para que la inversión especulativa no se vaya a dólares y genere presión sobre el tipo de cambio y los precios.

 

Precisamente, una de las preocupaciones de mañana es que los inversores decidan no renovar sus Lebacs y volcarse al dólar, algo que agregaría más nafta al fuego en medio de la actual corrida cambiaria.

 

Algunos analistas estiman que habrá una renovación mínima del 70% del stock porque más de un tercio de los vencimientos están en poder de los bancos, que quedaron limitados para disponer de sus dólares por una normativa reciente.

 

¿Qué son las Lebac?

Las Letras del Banco Central (Lebac) son títulos de deuda en pesos que emite la autoridad monetaria a 35, 63, 91 y 270 días, en cuyo vencimiento se paga capital e interés. Su licitación es mensual, el tercer martes de cada mes, y luego existe un mercado secundario para comprar o vender los títulos igual que con las acciones o bonos.

 

El BCRA fija la tasa de este instrumento en cada licitación a partir de las ofertas que recibe y la necesidad de aspirar liquidez que tenga para combatir la inflación. Hay un tramo competitivo, donde bancos y grandes inversores hacen ofertas mayores a $ 1 millón y la entidad acepta o rechaza las tasas y montos ofrecidos, y otro no competitivo para inversores minoristas (menos de $ 1 millón).

 

El Banco Central fija la tasa en cada licitación, a partir de las ofertas que recibe y la necesidad de quitar pesos del mercado. Hay un tramo competitivo, en el que bancos y grandes inversores hacen sus ofertas (mayores a $ 1 millón) y la entidad monetaria acepta o rechaza las tasas y montos ofrecidos.

 

Una vez que se definen esos valores, hay un tramo no competitivo, en el cual los inversores aceptan la tasa fijada por el tramo competitivo. En este último tramo ingresan los ahorristas minoritarios.