Las personas que habitamos en la provincia de San Juan, que está aislada del Océano Pacífico por la Cordillera de los Andes y alejada del Océano Atlántico por aproximadamente mil kilómetros de pampa, sin ríos navegables y con sólo algunos lagos artificiales aptos para la práctica náutica, carecemos (con justificadas razones) de tradición naval, tan natural en pueblos litoraleños. Esta carencia nos juega malas pasadas. Puede desembocar en confusiones de concepto que, además de hacernos incurrir en un error de carácter meramente técnico, ensombrece la imagen que puede llegar a hacerse de nuestra sociedad algún visitante familiarizado con la jerga marinera.
Si invitamos a un turista venido desde, por ejemplo, Bahía Blanca, a pasear en el flamante "catamarán”, en el Dique de Ullum, lo más probable será que enseguida note el error. En el mejor de los casos hará una observación amigable entre los presentes, aclarando que esa embarcación es una lancha monocasco, y no un catamarán. Otros, menos amables (que, lamentablemente, nunca faltan), guardarán silencio con una semisonrisa de mofa, y harán su comentario en otros foros y en términos menos constructivos.

Así es que, aprovechando que este nuevo emprendimiento turístico nos acerca un poco al mundo de la navegación y no sólo para evitar comentarios perniciosos, sino para honrar los largos milenios de tradición marinera de la humanidad, me permito hacer la siguiente aclaración: la denominación "catamarán” hace referencia al casco (parte que está en contacto con el agua) de la embarcación y no al uso que de ella se hace. En este caso, una lancha de pasajeros con fines turísticos: simplemente, una Lancha de Paseo.
Probablemente la confusión tenga origen en el hecho de que en los célebres paseos por el río Tigre, en la provincia de Buenos Aires, la mayoría de las embarcaciones que allí se emplean son catamaranes propiamente dichos. De ahí puede haber nacido el error de creer que embarcación de pasajeros y catamarán son sinónimos. Sin más, y esperando que este pequeño aporte contribuya a enriquecer nuestro pobre diccionario náutico, lo saludo con consideración e invito a todos los sanjuaninos y visitantes de otras ciudades a pasear en lancha por las aguas de nuestro querido Dique de Ullum.
Martín Alejandro Aliaga – DNI 31.642.958.
