El cyber ataque masivo que tuvo como víctimas el viernes a varias empresas españolas y, en particular, a Telefónica, volvió a poner sobre el tapete un tema clave: la seguridad tecnológica.
La mecánica en cuestión se denomina ransomware, palabra que viene de la unión de "software" y "ransom", palabra inglesa que significa "rescate".
Es que estos softwares maliciosos encriptan la información guardada dentro de cada computadora, para que luego el atacante extorsione al usuario pidiendo un pago monetario a cambio de devolvérsela.
TOMAR PRECAUCIONES
Y si bien las empresas están mucho más expuestas a este tipo de ataques que los usuarios comunes, ya que poseen información más valiosa, bien vale tener a mano una serie de consejos que servirán no sólo para evitar ataques de ransomware, sino también proteger en general la integridad de cada computadora.
Mantener actualizado el sistema operativo, los navegadores y elantivirus. En general, las empresas de software procuran solucionar los puntos flacos del sistema operativo y los softwares en cada actualización, sumando nuevos parches de seguridad.
Vigilar el correo electrónico. Muchos cyber ataques y hackeos provienen del phishing, mails que aparentan provenir de fuentes confiables (como bancos o instituciones educativas) y solicitan que el usuario ingrese datos confidenciales. Si el remitente del mail es dudoso, hay que evitar brindar contraseñas, abrir archivos adjuntos o clickear links incluidos en el cuerpo del correo.
Ser cauto con Whatsapp y Messenger. Hay que desconfiar al instante de links o archivos adjuntos sospechosos enviados por servicios de mensajería, ya que pueden provenir de usuarios infectados.
Hacer copias de seguridad de los archivos. Lo más recomendable es tener al menos dos copias de seguridad actualizadas de los datos guardados en la computadora. Además, se aconseja guardarlas en dispositivos o servidores diferentes.
Proteger los dispositivos conectados. Precauciones como contraseñas seguras, antivirus y "firewalls" deben repetirse en todos los dispositivos que compartan la red, como relojes inteligentes o televisores "smart".