Se ha tornado habitual y es un requerimiento indispensable controlar la calidad y certificar procesos tanto en la elaboración de productos como en la producción de servicios para dar garantía de los mismos. Los productos frutihortícolas no son ajenos a estos procesos y cada vez es más necesario que la producción exportable de la provincia cuente con esos controles de calidad para alcanzar más y mejores mercados a nivel internacional.

La producción y exportación de pasas de uva, de lo que San Juan es líder a nivel nacional, acaba de recibir un importante impulso al haberse creado un laboratorio de control de calidad que permite a pequeños y medianos productores realizar controles de calidad de las pasas en distintas etapas de elaboración, garantizando su buen estado mediante un riguroso sistema desarrollado por técnicos locales. La experiencia está a cargo del INTA en coordinación con la Coviar (Corporación Vitivinícola Argentina) y la Unidad Integrada de la Facultad de Ingeniería, que tiene a su cargo el funcionamiento del laboratorio en la Estación Experimentalo que el INTA posee en Pocito.

En San Juan el control de calidad de la mayoría de los productos, tanto para exportación como para consumo interno, pasa por una serie de laboratorios pertenecientes al área oficial de Gobierno como de las unidades académicas representadas por la Universidad Católica de Cuyo y la Universidad Nacional de San Juan. Del Gobierno depende del Instituto Tecnológico de San Juan o Laboratorio Oficial que al igual que el Laboratorio Alberto Graffigna de la Católica, está ofreciendo la posibilidad de realizar análisis para el control y certificaciones de calidad de numerosos productos de origen frutihortícolas como los aceites de oliva. Estos dos centros de análisis son los más grandes junto a los laboratorios que dependen de la UNSJ o el Instituto Semillero que es más específico en la tarea de controlar la calidad de las distintas semillas que se producen en San Juan.

El laboratorio "Q-pasas", tal la denominación que se le ha dado a este nuevo centro de análisis, está más orientado a pequeños y medianos productores que no tienen la posibilidad de acceder a los grandes laboratorios ya sea por los costos que implican o por la cantidad que mueven.

El sector pasero que en conjunto representa una de los principales recursos exportables de San Juan y de la Argentina tiene ahora la posibilidad de realizar sus controles de calidad que le permiten seguir la evolución de la producción y cumplimentar pasos necesarios para certificar la calidad que se exige en los mercados internacionales.