La primera finca productora de leche de burra del país comenzó a utilizar esta materia prima para producir cremas de uso cosmético para pacientes oncológicos, además de comercializarla para el consumo humano.
"Empezamos con las primeras 12 burras. Es algo bastante artesanal y se está estudiando mucho. Estas son las primeras que vamos incorporando y después dependerá de cómo se mueve el mercado. La idea con la leche de burra es la venta de la leche congelada y pasteurizada y después la elaboración de una línea de cosméticos", explicó el dueño de la finca El Pichanal, de Catamarca, Rogelio Aligananni.
Este emprendedor explicó a Télam que la empresa "va a sacar toda una línea de cosméticos a base de leche de burra porque tiene propiedades excepcionales para la cosmética. Esta línea va a ser muy específica y muy especial ya que la leche de burra también tiene excelentes propiedades nutrientes para la piel".
También explicó que este producto tiene propiedades "inmuno-estimulantes".
"Estamos apuntando a un mercado de alta sensibilidad en lo que hace al valor de nutrición de la piel, rejuvenecimiento y sobre todo el tratamiento de pieles oncológicas. El paciente oncológico requiere toda una característica muy importante para la cosmetología y ahí nosotros -con este producto- vamos a estar cubriendo un espacio muy importante", destacó el empresario, que ya cuenta con la experiencia de producción de cosméticos a base de leche de cabra en Santa Fe. En relación a las potencialidades del mercado, Aligananni señaló que es una cuestión novedosa e incipiente.
"Nosotros no sabemos hasta dónde puede dar el mercado, pero sí que es una cosa nueva, es un recurso nuevo", puntualizó el emprendedor que no oculta su entusiasmo por esta apuesta que se suma a otras producciones más tradicionales. "Es algo que va a dar mano de obra a gente de la zona. Hoy en la finca trabajan 9 personas, que están encargadas de distintas áreas entre la quesería y los que realizan el control de los animales", dijo, ya que en dicho establecimiento también funciona la producción de leche y quesos de cabra.
"En Argentina creo que somos los primeros en desarrollar productos de este tipo, no tengo conocimiento y no figura en ningún lado que haya otro tambo de burras", precisó.
Al mismo tiempo alertó sobre los costos de la producción de la leche de burra, la cual comenzó a producirse en la finca en noviembre del año pasado.
"El problema son los costos fijos. Una burra produce un litro y medio diario, y se puede llegar a más, pero en estas primeras lactancias las producciones son bajas, con las cabras pasa lo mismo. Son producciones estacionales, por ejemplo: la burra sino tiene el burrito, no produce leche. No es como la cabra o como la vaca, a la que uno le saca el ternero y sigue ordeñándola", remarcó.
Finalmente Aligananni señaló que hoy en día el fuerte de El Pichanal es la elaboración de quesos de cabra y que están incorporando nuevos y únicos productos como un licor de leche de cabra, licores de dulce de leche del mismo animal además de la venta de leche fresca de cabra, congelada y pasteurizada.
"Vendemos en todo lo que es la región del NOA, zona turística de Santiago del Estero y en zonas de Santa Fe, Entre Ríos y Córdoba. Este mercado lo ocupamos ahora con venta directa".
Aligananni se mostró satisfecho "porque los resultados son buenos", y agregó que la iniciativa se lleva adelante "con un gran esfuerzo" y un "gran amor" por el emprendimento.