La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) volverá a declarar hoy por la supuesta trama de pago de sobornos de empresarios a funcionarios de su Gobierno, una red que, según el juez, ella lideraba junto a su marido, el exmandatario Néstor Kirchner (2003-2007).
El magistrado de la causa, Claudio Bonadio, la citó la semana pasada para ampliar su declaración indagatoria, junto a una decena de acusados. "Atento a los elementos de prueba incorporados a la causa, los descargos de los imputados y los dichos de los "arrepentidos", se encuentran reunidos elementos suficientes para ampliar la declaración indagatoria", justificó en su decisión el juez federal.
Desde que dejó el poder a finales de 2015, la exmandataria ha sido procesada en seis causas, cuatro de ellas instruidas por Bonadio. En la reciente "causa de los cuadernos", bajo secreto de sumario y llamada así porque se inició con las anotaciones de un chofer que registraban los supuestos pagos de sobornos, el juez publicó el 25 de agosto un documento en el que indicaba que Kirchner (fallecido en 2010) y Fernández fueron, junto a su ministro de Planificación, Julio de Vido (2003-2015), los "verdaderos beneficiarios" de la trama. Por ello, acusaba a los tres de liderar una "organización delictiva".
El magistrado ya pidió la detención de Cristina, que no se puede hacer efectiva por su condición de senadora hasta que obtenga la aprobación de la Cámara Alta, y hace dos semanas, se procedió tras el visto bueno del Senado al registro de tres casas de su propiedad. Una de ellas es un departamento en el barrio porteño de Recoleta, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Las dos restantes están en la Patagonia, más precisamente en la provincia de Santa Cruz.
Como cada vez que debe presentarse a una citación, la senadora le pidió a los militantes que "no se movilicen" a los tribunales de Comodoro Py, en la ciudad de Buenos Aires: "Pongan la energía en defender la universidad y la salud públicas, la ciencia y la tecnología", escribió la exjefa de Estado.