La ciencia ha demostrado que la vida tiene una procedencia marina, de hecho, el agua de mar tiene una composición química muy parecida al plasma sanguíneo, por eso los expertos coinciden en que es muy beneficiosa para los seres vivos.

 

El agua de mar tiene una composición diferente a la que se encuentra en espejos de agua dulce como ríos, lagos y lagunas. Ésta posee hasta los dos tercios de los elementos químicos naturales: hidrógeno, nitrógeno, oxígeno, magnesio, sodio, potasio, yodo, calcio, hierro, fósforo, flúor y zinc, entre otros, que la convierten en una gran aliada para nuestra piel y el cuerpo en general.

 

Propiedades del agua de mar

 

– Antiséptico y antibiótico. Los diferentes componentes del agua marina hacen que dos de sus más importantes propiedades sean el efecto antiséptico y antibiótico, por lo que ayudará a la cicatrización y curación de cortes y heridas.

 

– Relajante muscular. El yodo favorece a la recuperación de ciertas lesiones, a la vez que flotar en el mar o nadar entre las olas relaja los músculos. Es ideal para los que están haciendo rehabilitación o tratamientos post operatorios.

 

– Trata enfermedades de la piel. El agua de mar actúa como exfoliante natural gracias a sus minerales. Es ideal para tratar enfermedades en la piel como la psoriasis ya que los lavados con agua marina ayudan a que las escamas características se desprendan y caigan solas. Lo mismo sucede en casos de alergias y eccemas, los minerales del agua pueden matar bacterias y microorganismos. Por otro lado, acelera la curación de la piel de manera más rápida y eficaz. También es beneficioso contra la picazón del cuero cabelludo.

 

– Alivia problemas respiratorios. Respirar la brisa marina y el agua salada ayuda a los pulmones a eliminar toxinas, por lo que está recomendado para personas que sufren algún problema respiratorio. También es favorable para curar catarros, resfríos y tos con flema. .

 

– Trata problemas reumáticos. Bañarse de forma regular en el mar es también beneficioso para personas que tengan problemas reumáticos. El agua del mar puede ayudar a reducir los intensos dolores que provocan la artritis o la artrosis.

 

– Calmante natural. Al contener magnesio, el agua de mar ayuda a calmarnos y a eliminar la ansiedad. Es por eso que pasar algunos días en la playa, en especial cuando no hay tanta gente o en los balnearios alejados de los centros urbanos, es una terapia que se recomienda para los que sufren de trastornos nerviosos, depresión o estrés.

 

– Exfoliante. Caminar por la orilla del mar sobre la arena, además de ser un ejercicio y de aydra a despejar la mente, las olas y la textura de la arena masajean nuestros pies y exfolian los talones.

 

– Tratamiento para hígado y riñones. El agua de mar permite regenerar las células que se dañan por la cirrosis, por ejemplo. En esta enfermedad se acumula mucho líquido en el vientre y varios estudios demostraron que beber agua de mar puede ayudar a eliminarla. En los casos de personas con insuficiencia renal, el beber agua marina ayuda a combatir mareos, vómitos y problemas para orinar.

 

– Tratamiento contra el insomnio. A las personas que padecen de insomnio se les aconseja ir a la playa a pasar el día, caminar por la orilla del mar o simplemente quedarse frente a las olas respirando la brisa, cualquiera de esas opciones harán que la persona sienta más cansancio y pueda dormir durante la noche.