Ante una vida sexualmente activa, pero sin el deseo de fecundar, existen distintos métodos que cumplen la función de anticonceptivos. Dentro de los mismos podemos encontrar los métodos hormonales, siendo la píldora la más conocida, pero también están los anticonceptivos de barrera.
“Los métodos anticonceptivos de barrera impiden la fecundación a través de una barrera física, logrando una eficacia media-alta y a su vez, protegen de enfermedades de transmisión sexual”, detalla la tocoginecóloga Daniela Saldívar. Este tipo de método, como su nombre lo indica, sirve de barrera impidiendo que los espermatozoides ingresen al útero, evitando así la fecundación.
Dentro de este grupo se encuentran:
*Preservativo femenino: Es una funda similar al preservativo masculino, pero de mayor tamaño, que se coloca recubriendo las paredes de la vagina y la vulva para impedir el paso de los espermatozoides al interior del útero. Además, protege de las enfermedades de transmisión sexual. Cabe aclarar que se trata de un método de un solo uso, por lo que no debe ser reutilizado.
*Diafragma: Es una media circunferencia de látex o silicona que se coloca, antes del acto sexual, en el fondo de la vagina cubriendo el cuello del útero. Este método impide el paso de los espermatozoides al interior del útero, protege parcialmente de las enfermedades de transmisión sexual y es reutilizable. Hay que tener en cuenta que no debe retirarse hasta 6 horas después de la eyaculación.
*Capuchón cervical: Se trata de una versión evolucionada del diafragma que recubre el cuello uterino y es de un solo uso. Este tipo de método protege parcialmente de las enfermedades de transmisión sexual y debe usarse si o si con espermicida.
Métodos de barreras masculinos
Los cuidados íntimos sexuales no deben ser solo responsabilidad de la mujer. Si bien hay más variedad, los hombres también deben cuidarse a la hora del coito.
El método que existe es el preservativo o condón. Consiste en una funda de látex o de otro derivado del plástico que se coloca sobre el pene en erección, antes de la penetración. Este método impide el paso de los espermatozoides y protege de las enfermedades de transmisión sexual. Es de un solo uso, por lo que una vez usado, debe ser desechado.
Según detalla la doctora Saldívar, actualmente hay varias investigaciones en marcha con el objetivo de crear un anticonceptivo masculino reversible y que sea semejante al femenino. Entre los principales métodos masculinos que están en desarrollo e investigación se encuentran el anticonceptivo en gel y la píldora, que actúan disminuyendo la producción de espermatozoides y su movilidad, pero poseen efectos reversibles.
Los cuidados íntimos corresponden tanto a hombres como mujeres por igual. Forman parte de la responsabilidad personal y del compromiso con el otro, sea o no pareja. Como se ha mencionado anteriormente, no solo es para evitar embarazos no deseados, sino también el contagio de enfermedades de transmisión sexual, algunas de ellas, graves.