El relato de una sanjuanina en Facebook, identificada como A.L. (se protege la identidad de la denunciante), estremece, hiela la sangre. Lo que dijo en redes sociales lo expresó en la Comisaría de la Mujer el último sábado. Es un nuevo caso de violencia de género en San Juan que incluye hasta presunto abuso sexual con acceso carnal.
La joven contó que el viernes a la salida de una fiesta camino a su casa, su ex (cortaron hace 2 años, detalló) la abordó y detalló todo lo que ocurrió.
"Al llegar a las 4:40 a la casa de un amigo el cual no sé encontraba. Me golpeó (su ex, J.G.) a tal punto de no dejarme ir, retenerme de esa hora hasta las 8;30 que le supliqué que me traiga a mi casa. Esto sucedió en la vía pública la cual no recuerdo el barrio, no frecuentaba ninguna persona por la calle, en todo momento me siguió pegando amenazándome si gritaba", contó A.L..
En el extenso texto que publicó, hizo mención a otro momento de esas horas de terror: "apareció un Gol negro, el cual nos alumbra pero no se si se da cuenta de la secuencia de mi cara toda ensangrentada y sentada en el cordón de la calle (…) al querer gritar, Julián amenazándome que si gritaba le pegaba a él y a mi. Quise escaparme en todo momento pero no pude, me forzó en todo momento subirme al auto e ir a su casa para lavarme la cara . En se momento le pedí agua para lavarme la cara y boca ya que me salía mucha sangre y me ahogaba. Accedo al subirme al auto".
Y agregó, "me seguía insultando verbalmente que me lo merecía, luego que lo perdonara que no lo quiso hacer que se equivocó pero que yo que era la culpable porque se había puesto celoso (…) que yo sola me lo había buscado que él reaccionara así".
El terror tuvo su pico máximo en otra secuencia que relató esta joven, "llegamos a su casa y no quise entrar, sólo estar afuera, es ahí donde me quito los zapatos para poder salir corriendo , me ahogué con la sangre la cual manchó toda la entrada de su casa, su remera, mi ropa y dentro del auto lo cual se enojó de la manera que me pegó dos patadas pegándome en la cabeza. Obligándome a entrar para lavarme la cara , no me dejó secarme con la toalla ya que era blanca y iba quedar en evidencia. Cuando me dejó solo atiné a sacarme una foto del miedo que tenia no podía colocar la contraseña pero saqué una foto como pude, rápido antes de que viniera ya que él estaba limpiando en los escalones la sangre que había dejado".
Y sentenció, "en ese transcurso seguía insultándome, obligándome a besarlo sino me iba a seguir pegando me tiraba de los pelos y me dio cachetadas. Le decía en todo momento que salgamos afuera que quería respirar , hasta que accedió y trate de correr dos veces la cuales me pilla (…) Me lleva de nuevo a los escalones y me quiso besar como no quise me decía ‘dale estúpida bésame bien con ganas’. Accedí para poder tranquilizarlo y me pudiera traer a mi casa. Me obligó a tener relaciones sexuales las cuales no quería pero sino no me podía traer. En todo momento le dije que no iba a contar nada para que no se hiciera problema. En el camino de su casa hasta la mía venía muy rápido y le pedí que vaya despacio que si se quería matar que lo lo hiciera solo que yo quería vivir , porque eso también me dijo que si yo decía algo se iba a matar. Al llegar a mi casa , cómo si nada al bajarme rápido me dijo “no pensás saludarme“ como que no me hizo nada (…) El día de de hoy me llamo como si nada de otro nro diciéndome que como estaba que dejemos de pelear.